Un libre pensador que incomodó, que utilizó la poesía para levantar la voz aunque fuera perseguido y hasta desterrado, un boyacense incomprendido que aunque partió a la eternidad hace 100 años, logró inmortalizarse en sus versos, en cada uno de sus escritos. Ese podría ser un resumen de lo que significó Julio Flórez Roa para Colombia y el mundo.