El operativo de 1.200 kilómetros, con escolta militar y maniobras milimétricas, se convirtió en una muestra de la capacidad técnica y logística de Transportes Montejo, empresa boyacense.

El convoy de Transportes Montejo recorrió más de 1.200 km para entregar los primeros vagones del Metro de Bogotá. Foto: Prensa Metro de Bogotá
*Por: Nury Vargas
Bogotá vive un momento decisivo en su historia de transporte masivo: seis vagones del primer tren de la Línea 1 del Metro de Bogotá llegaron al Patio Taller de Bosa tras un viaje épico de más de 1.200 kilómetros desde el puerto de Cartagena, liderado por la empresa especializada Transportes Montejo, originaria de Duitama, Boyacá.
Una compañía con legado y especialización
Transportes Montejo es una firma con más de setenta años de trayectoria en transporte especial. Su origen se remonta a 1953, cuando Hernán Montejo, residente en Duitama, junto con su esposa, Melba Riaño, emprendieron un negocio dedicado inicialmente al transporte de cargas de la región para múltiples destinos.
Con el tiempo, la empresa se ha especializado en logística, extrapesada y equipos de izaje para obras civiles e industriales. Además, ofrecen servicios multimodales y han sido destacados internacionalmente. Por ejemplo, fueron reconocidos por la revista internacional Cranes and Specialized Transport como una de las mejores empresas de ‘Heavy Transport’.
El operativo: retos, precauciones y orgullo boyacense
El convoy salió del puerto de Cartagena el pasado viernes 5 de septiembre, y tras seis días de recorrido, escoltado por la Policía, el Ejército Nacional y la Armada, ingresó a Bogotá para finalmente entregar los vagones en su punto de destino al amanecer del jueves 11 de septiembre.

El convoy salió del puerto de Cartagena el pasado viernes 5 de septiembre. Foto: Prensa Metro de Bogotá
Durante el traslado de los primeros vagones del Metro, el equipo de Transportes Montejo tuvo que superar importantes desafíos técnicos y logísticos. Cada movimiento fue planificado al detalle: maniobras precisas por las grandes dimensiones de los vagones —134 metros de longitud, 2,90 metros de ancho y 3,90 metros de altura— para evitar interferencias con ramas de árboles y coordinación permanente con las autoridades viales para garantizar un paso seguro en todo el trayecto.
Además, los vagones fueron cubiertos con una malla y cuatro capas especiales de protección para evitar daños por polvo y lluvia en las ventanas y salvaguardar sus componentes electrónicos.
La operación requirió el uso de seis camas bajas especializadas, diseñadas para soportar el peso y el volumen de la carga, en una de las movilizaciones más complejas que ha enfrentado el país en transporte sobredimensionado.
Dos trabajadores de Montejo relataron al equipo de la Alcaldía de Bogotá: “El reto ha sido bastante grande… una carga muy delicada, por su tamaño y su altura… los árboles son la parte más delicada”, expresó Daniel García, conductor con más de 35 años de experiencia, 15 de ellos en equipos especiales.
“Me siento muy orgulloso de trabajar en Transportes Montejo, poderles cumplir a los bogotanos el objetivo que es que tengan su metro al fin, de tanto sueño tan anhelado”, expresó Sergio Arenas, de Guateque, Boyacá.
Un destino simbólico y un impacto concreto
El arribo de estos seis vagones al Patio Taller de Bosa no es solo un hito logístico, es el comienzo tangible del montaje, las pruebas estáticas y dinámicas del tren, en la vía de pruebas de 902 metros que se encuentra en dicho patio.

La operación requirió el uso de seis camas bajas especializadas. Foto: Prensa Metro de Bogotá
Es también una demostración de que el Metro de Bogotá —uno de los proyectos de infraestructura más importantes del país— avanza hacia su materialización.
Por otra parte, Transportes Montejo ha demostrado que en sus más de seis décadas de experiencia, las inversiones en equipos de última tecnología, la pericia de su talento humano y sus altos estándares de seguridad marcan la diferencia en proyectos de gran envergadura como el Metro de Bogotá.
*Redactora de Boyacá Sie7e Días