Desde el centro de analítica de la EBSA, ayudados con inteligencia artificial, están identificando los fraudes, por mínimos que sean.

Cualquier manipulación o alteración al sistema eléctrico puede tener consecuencias, ya sea monetarias o penales. Foto: archivo particular
*Por: Yuliana Bohórquez Montañez
Un comerciante de 41 años, propietario de un supermercado en el barrio Fuente Higueras de Tunja, enfrenta líos legales y económicos tras ser sorprendido en flagrancia con un sistema fraudulento para reducir el consumo de energía en refrigeradores, neveras, congeladores y otros equipos.
El hallazgo se produjo frente al Batallón Bolívar, donde técnicos especializados de la Empresa de Energía de Boyacá (EBSA), apoyados por la Policía Metropolitana de Tunja, detectaron la acción ilegal.
De acuerdo con el abogado de la Dirección Control Pérdidas de la EBSA, “en desarrollo de las actividades de control de defraudación de fluidos, se hizo seguimiento a este caso del supermercado, donde se detectó un sistema al que denominan ‘bypass’, que estaba enterrado para contabilizar menos cantidad de energía de la que realmente consumían”, señaló.
Tras la inspección, uniformados le leyeron al comerciante el artículo 256 del Código Penal Colombiano, que establece penas de 16 a 72 meses de prisión y multas de 1,33 a 150 salarios mínimos por apropiarse de servicios como energía eléctrica mediante mecanismos clandestinos o alteración de medidores. El negocio quedó sin servicio, fue cerrado y el propietario conducido a la URI.
Además de las posibles consecuencias penales, el hombre tendría que pagar una sanción cercana a los 76 millones de pesos, “que es la cifra que fue tasada por la EBSA, al hacer los cálculos de consumo y cruzarlos con tiempos y la analítica con que cuentan”, dijeron en la empresa. La EBSA integra también herramientas de inteligencia artificial para detectar fraudes, incluso en casos de mínima manipulación.
El gerente de Comercialización de EBSA, Miguel Ángel Castellanos, explicó que la compañía cuenta con “un nutrido grupo de personal especializado de ingenieros y técnicos dedicado a hacer el monitoreo para identificar cualquier caso sospechoso, independientemente de si se registra en un inmueble residencial, comercial o industrial, de si es en el área urbana o rural, de si es una instalación antigua o nueva”, aseguró.
La Policía Metropolitana de Tunja señaló que el propietario del predio es reincidente en esta conducta y que la detección del fraude fue precisa gracias a la inspección técnica.
Desde la EBSA, Castellanos advirtió a los usuarios sobre las consecuencias legales y de seguridad de manipular medidores o instalaciones eléctricas. “La verdad es que esto es un delito y que puede tener consecuencias de tipo penal”, afirmó, recordando que este tipo de prácticas puede provocar cortocircuitos, daños en la instalación, averías de electrodomésticos, incendios o accidentes graves.
Al moderno sistema de analítica de la Empresa de Energía, se suman las denuncias a través de las líneas telefónicas o demás sistemas de comunicación, incluidas redes sociales, en los que vecinos o transeúntes pueden reportar situaciones o actividades sospechosas relacionadas con la red eléctrica.
*Redactora de Boyacá Sie7e Días