Este jueves continuará la mesa de diálogo entre campesinos parameros y el Gobierno nacional en el Puente de Boyacá

Tras más de 12 horas de discusiones, se lograron acuerdos parciales, pero aún persisten diferencias.

Voceros de los párameros en la mesa de negociación. Foto: Boyacá Sie7e Días

*Por: Yuliana Bohórquez Montañez

Este jueves 7 de agosto continúa la mesa de diálogo instalada en el Puente de Boyacá en el marco del paro de campesinos parameros, que ya completó su tercer día de movilización. Las conversaciones buscan avanzar en la resolución de los conflictos históricos entre el campesinado y las zonas de especial importancia ambiental.

Durante la jornada de ayer estuvieron presentes las ministras Martha Carvajalino, de Agricultura, e Irene Vélez, ministra encargada de Ambiente; también participó el director de la Agencia Nacional de Tierras, Felipe Harman; viceministros; el director del IGAC y otras autoridades del orden nacional. Así mismo, asistieron todos los voceros de los campesinos de páramo y el gobernador de Boyacá, Carlos Amaya, junto a varios miembros de su gabinete departamental.

Las negociaciones, que se extendieron por más de 12 horas, permitieron alcanzar avances parciales en puntos clave, como la delimitación de los páramos, la frontera agrícola y la zonificación ambiental. Sin embargo, aún persisten desacuerdos en algunos temas, que se espera puedan resolverse durante la jornada de hoy.

La ministra de Agricultura, Martha Carvajalino, destacó el compromiso del Gobierno nacional con los campesinos y la protección ambiental.

“Estamos aquí con la ministra de Ambiente ratificando una disposición del presidente de la República de proteger la estructura paramera y a los campesinos que la habitan y conservan. Nosotros hemos dicho de manera muy clara: los campesinos deben permanecer en su territorio, no tenemos ningún interés de sacarlos. Estamos resolviendo un conflicto de hace muchos años”, aseguró.

Carvajalino también enfatizó que la agricultura campesina no está destruyendo los ecosistemas, sino que ha contribuido históricamente al cuidado del agua, los bosques y el suelo:

“La agricultura campesina es una agricultura que rota, que combina cultivos y que está pensando en el uso sostenible del recurso. Sí, hay prácticas que debemos mejorar, y hay zonas que deben restaurarse, pero esto debe ser parte de un gran acuerdo entre el Gobierno y el campesinado para conservar y producir de forma sostenible”.

Además, recordó que el acto legislativo 01 del 2023 modificó el artículo 64 de la Constitución, reconociendo al campesinado como sujeto de especial protección constitucional en su dimensión social y ambiental, un mandato que debe reflejarse en todas las normas e instituciones del país.

El Gobierno nacional reiteró su voluntad de avanzar en un pacto que garantice la permanencia digna de los campesinos en sus territorios y la conservación de los ecosistemas de páramo. Las mesas de diálogo continúan hoy con la expectativa de lograr acuerdos definitivos.

*Redactora de Boyacá Sie7e Días

-Publicidad-