No es solamente la parte económica, social, salud, de vías, ambientales y demás, que hacen parte de las que juraron defender y hasta les sirvieron de pretexto en sus campañas -y hoy no han podido cumplir- y sí han sido el epicentro de las burlas en supuestas negociaciones por la presiones de absurdos paros, con avionetas aparecidas de la nada… y que no cuenta con cronogramas ni veedurías para hacer seguimiento a su cumplimiento y ya vendrán otras repetidas llegadas a la madrugada, para afectar a inocentes, y ponerles parqueadero a muy modernos vehículos de patrocinadores, y poniendo a exaltar a sus militantes -e incluso limitando el trabajo de periodistas-, cuando fueron claves para saber de lo que por calenturas nos tuvo en vilo cuatro días perjudiciales.
Las consecuencias se van a ver, algunos ya las sienten, en la medida en que manipulen titulares, pronunciamientos, ruedas de prensa y hasta documentos con “acuerdos” firmados por personajes sin capacidad de negociación o limitadas a las que vía celular se dictan; con la premura de sosegarse.
No podemos -o seguir- en ser tan ingenuos a sabiendas que atrincherarse en una glorieta o rotonda, bloqueando el paso de todo tipo de vehículos y hasta peatones, y salir a pavonearse y decir que se agradece las “muestras de voluntad” (¿?) para permitir que administren las vías nacionales y públicas, en vez de haber ido hasta Cali, y saludar a los ilustres visitantes de la COP16, y lograr ser escuchados, visibilizados y hasta invitados a dar soluciones reales, y con recursos de cooperación…
Y qué coincidencia que se vuelva a “jugar” con las regiones, a las que utilizan a su acomodo, y poner en la agenda las necesidades que requieren de soluciones urgentes a los temas de salud, educación y agua potable para que sean las que asuman, con unos muy dudosos anuncios, de trasladarle las obligaciones del debilitado, y muy poco creíble gobierno nacional, y dejárselo a los que fungen en el orden regional y local, que demostrado está son muy malos para ejecutar o muy vivos, para sus intereses.
No dejemos que, con palabrejas, como las de “sistema general de participación (SGP)”, que en pocas palabras son las obligadas trasferencias, que son de nuestros propios recursos, y se han imantado en unas regiones, que lo tiene todo. Y la tal “insostenibilidad fiscal” para ser negativos en buscar alternativas para devolverle desarrollo a nuestras regiones; para sí tener recursos y ser robados por vivarachos en ánimo de satisfacer –a como dé lugar- a sus jefes y empezar a devolverle con obras e inversiones priorizadas por las comunidades –el pueblo-, y de los entes de control poco y nada.
Lo consagrado en la Constitución del 91, que no ha sido desarrollada en alto porcentaje, todos volvemos a perder, por estar en la manida confrontación por sus aspiraciones y venir a gobernar (visitar la finca) mientras entre semana dan órdenes o instrucciones, y hasta decretos sin explicaciones, pasando por sobre el dolor de las zonas que les votaron, y hoy están más arrepentidas por haberse dejado embaucar, y otros celebrando porque llegan con cheques, algunos sin fondos.
Las obligaciones o competencias de los municipios y departamentos deben ser asumidas con responsabilidad y no con mentiras a unas supuestas descentralizaciones que sólo son las cartas a jugar en las próximas elecciones y aprovechando las programaciones que anuncian de todo. Y eso les servirá a los que aspiran a todo, para salir a vociferar -sin fundamentos o por saciar a los impávidos y hasta los camaleones que venden sus votos y hasta sus familias para llegar a sus metas.
Cambios para hacerla viable, hablamos de la autonomía de municipios, será el reto de los mal llamados jefes de las provincias, que se las reparten como si fueran los dulces del día de los niños.
Para dejarlos descansar, cual presidente de una de las partes de la rama legislativa, muy atentos a preservar la biodiversidad y tener, como la llave del hogar, los ODS y la sostenibilidad real en todo.
*Por: Ricardo Gabriel Cipagauta Gómez. @ricardocipago