Algunas sonarán como de Perogrullo pero de seguro en el interior personal, de hogares, de familias, de trabajo y del Alto Gobierno lo hemos hecho como ejercicio en la búsqueda de unas nuevas formas de convivencia, y que al parecer serán por largo tiempo y de ellas dependerá que en nuestro entorno nos volvamos sociables, respetuosos, cívicos y pensando en todos, sin discriminaciones y mucho menos intereses descoloridos o por las campañas que se avecinan. Ruego no polarizarnos. Que…
Son algunas pocas para cumplir, atento a sus ideas, enriquecimientos y ajustes a las consensuadas:
Que los toques de queda sean de medio o un día entre semana, pero avisados, no sorpresa.
Que se unifiquen picos y cédula, pares e impares, sus horarios y sean reales en todos los municipios.
Que vuelvan los verdaderos controles de bioseguridad, en todos los establecimientos y entidades.
Que en la medida que podamos, utilicemos dos tapabocas, bien puestos y con calidad certificada.
Que las empresas de servicios domiciliarios sean reales, profesionales y con personal capacitado.
Que se implemente la rotación de personal, por horarios, por ejes, por niveles, por turnos, por edad.
Que se consolide un directorio virtual sectorial a fin de conocer de sus servicios y garantías ofrecidas.
Que la manipulación de alimentos se vea con todos los elementos de seguridad y protocolos.
Que autoridades aprovechen los toques de queda para hacer arreglos en vías y señalización.
Que los controles a buses, busetas, taxis y particulares sean acordes a tantas exigencias humanas.
Que norma de no fumar, ni en lugares públicos, cuide a los adictos y a quienes somos no fumadores.
Que Alcaldes paguen cuñas, espacios, avisos y perifoneo, incluso volantes, con campañas reales con las que hagan pedagogía para enfrentar el virus.
Que dada la necesidad y coyuntura haya pico y placa en todos los municipios, no por conveniencias.
Que las bicirrutas, anunciadas en campañas, sean seguras, para promover vida sana y deporte.
Que haya ejercicios de preparación para las que serán largas jornadas de vacunación en sitios claves.
Que los medios de comunicación asumamos nuestra responsabilidad social y hagamos campañas pedagógicas contra el virus.
Que los artistas se unan en torno a temas de pedagogía para con sus actividades lograr conciencia.
Que mientras salen los decretos, se incluyan jornadas de desinfección, adecuación y ornato.
Que fuerzas militares distribuyan las 24 horas y áreas para hacer siembras ambientales y ecológicas.
Que no dejemos de realizar nuestros eventos y mediante redes y TIC integrarnos en educación total.
Que expendios de licores no sean en penumbras, fuera de horarios y atentando contra menores.
Que las actividades deportivas también cumplan horarios, protección, respeto de vías y espacios.
Que los restaurantes acondicionen espacios de atención campestre y sigan dando más ejemplo.
Que los Gobernantes vuelvan a hacer ruedas de prensa para poder contra preguntar y repreguntar.
Que Policía salga a hacer sus rondas para sentir su presencia en barrios, comunas y corregimientos.
Que gremios se dejen ver no solo para recoger regalos de Navidad, sino ahora que los necesitamos.
Que se repitan distribuciones de mercados y ayudas por parte de los aspirantes a cargos de elección y entidades.
Que nos den indicadores, comparativos, reportes y verdades para saber cómo es que estamos y YA.
Que las EPS e IPS nos llamen o visiten, nos den citas presenciales con todos los rigores, pero urgente.
Que los tales call center o líneas ofrecidas para servicios contesten y nos indiquen las respuestas.
Que siendo vecinos, conciudadanos, nos comprometamos a ayudarnos, apoyarnos y colaborarnos.
Que todas las anteriores no generen reacciones virulentas, sino más ideas y ante todos soluciones.
Es un año -serán varios…- en los que integrados demostraremos que el Creador nos hizo inteligentes.