Ernesto creció en la ciudad de Tunja y desde muy niño ha logrado destacarse en su habilidad con el tenis de mesa.
*Por: Yuliana Bohórquez

El joven deportista se ha dedicado al tenis de mesa desde niño. Foto: suministrada a Boyacá Sie7e Días
A sus 19 años, Ernesto Valencia Dueñas, oriundo de la ciudad de Tunja, cumple uno de los sueños más grandes de su vida deportiva: representar a Boyacá y a Colombia en la Academia de Tenis de Mesa de Vegas del Genil (VGTTA), en Granada (España), donde entrena y compite gracias a una beca internacional.
Su historia no comenzó en una cancha profesional, sino en los espacios deportivos del Colegio Campestre del Norte de Tunja y con una raqueta comprada en una tienda ‘todo a mil’. “Yo no quería que jugara fútbol, pero un profesor vio en él algo especial cuando tomó una raqueta. Desde entonces, no ha parado”, relata Marta Dueñas, la madre de Ernesto, en diálogo con Boyacá Sie7e Días.
Más tarde, en el Colegio de Boyacá, bajo la guía del profesor Hernando Valbuena, comenzó a destacarse en los Juegos Intercolegiados. “Todos los años sacaba medalla de oro”, recuerda Marta. “Era impresionante verlo competir con tanta pasión”. Posteriormente entró a formar parte de la Liga de Tenis de Mesa de Boyacá, “el problema era el apoyo. A veces los campamentos o torneos se quedaban sin recursos y nos tocaba cubrir los gastos”, cuenta su madre.

Ernesto Valencia Dueñas, de 19 años, nació y creció en la ciudad de Tunja. Foto: suministrada a Boyacá Sie7e Días
Ernesto participó en diversos campeonatos nacionales, fue medalla de bronce en individual y dobles mixtos en los Juegos Intercolegiados Nacionales 2023, subcampeón nacional juvenil en el 2024 y, además, hizo parte de la Selección Colombia en los Juegos Centroamericanos y del Caribe Escolares en Venezuela, donde también se colgó una medalla de bronce.
El año pasado viajó a Portugal para un entrenamiento en el Centro de Alto Rendimiento de Mirandela, por una postulación de la Federación Colombiana de Tenis de Mesa. Aquella experiencia sería la antesala para algo mejor: una beca en la Academia Vegas del Genil en España, en la ciudad de Granada.
“Yo misma lo postulé. Él contactó a una tenismesista colombiana, Paula Medina, quien creyó en su potencial y lo recomendó. Le ofrecieron alojamiento, alimentación y entrenamientos, pero nosotros tuvimos que cubrir los pasajes y los otros gastos”, señala la mamá.
La Gobernación de Boyacá, para este último viaje, les brindó patrocinio. “La doctora Daniela Assis y el gobernador, Carlos Amaya, nos ayudaron a conseguir el patrocinio. Él, como amante del tenis de mesa, entendió la importancia del esfuerzo de mi hijo”, asegura Marta.
A pesar de todo, el deportista no se rinde, el apoyo de sus padres desde el inició ha sido fundamental. Aplazó su carrera de Educación Física en la UPTC para aprovechar esta oportunidad en España, que sin duda alguna será de gran impulso para su carrera deportiva.
Desde España Ernesto envió un mensaje a los jóvenes deportistas: “me siento muy feliz de estar acá. Haber llegado tan lejos para mí es un logro muy grande y espero que esta experiencia me sirva para poder forjar mi carrera deportiva a futuro. Quiero animar a los chicos a que si tienen un sueño ¡háganlo!, si tienen que dejar cosas atrás por un bien mejor, ¡háganlo! Todo sacrificio, si se hace con el corazón, siempre valdrá la pena”, dice.
El joven viajó el 18 de octubre y permanecerá en Granada hasta enero del próximo año, preparándose en doble jornada de entrenamiento diario, con el objetivo de seguir creciendo profesionalmente y abrirse camino en el alto rendimiento internacional. Ernesto Valencia, ejemplo de disciplina, talento y perseverancia, es hoy uno de los mayores orgullos deportivos de Boyacá.
*Redactora de Boyacá Sie7e Días