Desde ayer se encuentra en capilla ardiente en el palacio de la Torre el féretro del exgobernador, exalcalde de Tunja y excongresista que será sepultado esta tarde.
En la ciudad que nació, creció, estudió y gobernó, será sepultado esta tarde en medio de honores, el exalcalde, exgobernador y excongresista Heraclio Fernández Sandoval, cuyo féretro se encuentra desde ayer en capilla ardiente en el Salón de la Constitución en el Palacio de la Torre.
Sus restos estuvieron desde el miércoles y, hasta la tarde del jueves en la Funeraria Gaviria en Bogotá. Sus hijos Gabriel Fernández Rojas y Ulises Fernández Rojas están agradeciendo las manifestaciones de condolencias e invitando a las exequias que tendrán lugar a partir de las 2:00 de esta tarde en la catedral Santiago de Tunja, con posterior traslado al cementerio local.
Diferentes personalidades acompañarán el sepelio de uno de los boyacenses más destacados del siglo pasado en el panorama nacional, y quien fue reconocido hasta sus últimos días por su lucides y memoria en los eventos académicos a los que era invitado.
Durante varios periodos fue concejal de diferentes municipios de Boyacá, diputado, alcalde de Tunja en 1965, en 1966 elegido representante a la Cámara, en 1976 nombrado Embajador de Colombia en Costa Rica en el gobierno de Alfonso López Michelsen y gobernador de Boyacá entre 1981 y 1982.
Su vida la dedicó al estudio del derecho, logrando marcado respeto y reconocimiento en el área judicial, dentro y fuera del país y al momento de su fallecimiento se encontraba en compañía de sus hijos Gabriel y Ulises en la Fundación Santa Fe, donde una neumonía lo tuvo en un delicado estado de salud y finalmente un procedimiento quirúrgico se complicó y terminó con su deceso.
Había nacido el 8 de mayo de 1931, cursó sus estudios de primaria y bachillerato en el Colegio Boyacá de Tunja, estudió derecho e ingresó al Ejército, para adelantar la carrera militar como oficial de donde se retiró en el grado de capitán. Durante varios años se presentó como el capitán abogado.
Se casó con Julia Rojas, la hija del ilustre historiador Ulises Rojas, con quien tuvo dos hijos gemelos: Gabriel y Ulises, quienes viven en España y estuvieron muy pendientes de él tras el fallecimiento de su esposa y madre hace cerca de 15 años.
Regresó a la Universidad La Gran Colombia, donde había hecho su pregrado, para doctorarse en Derecho y Ciencias Políticas, graduado en diciembre de 1959.
Fue historiador, escritor, ponente y panelista en eventos nacionales e internacionales. Autor de análisis jurídicos, políticos e internacionales en diferentes publicaciones. Siempre le gustó el periodismo, fue corresponsal de EL TIEMPO durante un lustro y columnista y colaborador permanente de Boyacá Sie7e Días.
El exgobernador de Boyacá, fue profesor de penales y oratoria forense en diferentes universidades de Bogotá y Tunja. Como parlamentario fue el autor de la ley de redención de penas por trabajo y estudio y la ley que creó un servicio equivalente al militar que dio origen a los Auxiliares de Policía.