Decenas de artistas de la música despidieron este domingo al cantautor hondureño Moisés Canelo, quien el pasado día 13 falleció en Nueva York, de un paro cardíaco, a los 74 años.
El homenaje a Canelo, quien era originario de una aldea del departamento de Colón, en el Caribe de Honduras, fue tributado en las instalaciones de Expocentro, de San Pedro Sula, la segunda ciudad más importante de Honduras, donde el artista vivió varios años, después de residir durante unas dos décadas en México.
Familiares y centenares de amigos asistieron al homenaje de Canelo, quien en México y otros países compartió escenarios con artistas como los mexicanos, Armando Manzanero, José José, Juan Gabriel y Marco Antonio Muñiz; el español Camilo Sesto y el chileno Lucho Muñoz, entre otros.
Canelo se inició en la música siendo un adolescente, aunque profesionalmente trascendió con el otrora conjunto musical Los Robins, de la caribeña ciudad de La Ceiba.
Con los Robins inmortalizó la canción ‘Noche de luna en La Ceiba’, aunque la primera versión fue grabada con Los Costeños, cuya letra es del mexicano Carlos Luna, quien la escribió en 1967 luego de maravillarse de una noche, con luna llena, en esa ciudad, una de las más hermosas de Honduras.
A Carlos Luna lo cautivó el ambiente del que disfrutaba con unos amigos en el centro nocturno Sea View, frente a las playas de La Ceiba, y así nació la canción que después fue grabada por Los Robins y Moisés Canelo.
A inicios del decenio de los 70, Canelo decidió abrirse campo en el exterior y viajó a México, de donde regresaba por temporadas a Tegucigalpa y San Pedro Sula, las dos ciudades más importantes de Honduras, a deleitar a sus amigos y seguidores con su música.
En la víspera, Carlos Luna destacó que Moisés, a quien en su adolescencia, cuando cantaba le decían el «Joselito hondureño», tenía «una voz excepcional».
Además de sus propios temas, Canelo interpretó muchos de cantautores nacionales como Alberto Valladares y Tony Sierra, que participaron en festivales de la Organización de la Televisión Iberoamericana (OTI).
Su esposa, Jemima, y sus hijos, Silvia y Max, agradecieron el homenaje tributado a Moisés Canelo, uno de los mejores artistas que tuvo Honduras en las últimas seis décadas.
Sus restos, cuya repatriación agilizó la Secretaría de Relaciones Exteriores de Honduras, llegaron el sábado a San Pedro Sula, donde fue velado y hoy, después del homenaje en Expocentro, fue sepultado con música de la Marimba Usula, con la que grabó varios temas suyos y de otros artistas hondureños, y aplausos.
Cuadros de danzas criollas también participaron en el último adiós de Moisés Canelo, cuyo ataúd, gris, fue cubierto con una bandera grande de Honduras y una blanca. El homenaje fue transmitido en directo por el canal de televisión Tele País.
La Marimba Usula interpretó ‘Noche de Luna en La Ceiba’ al momento del entierro del artista. EFE