El Ejército israelí mantiene su ofensiva en la Franja de Gaza, donde los muertos ya superan los 40.000.
Con información de la Agencia EFE
El ministro interino de Exteriores de Irán, Ali Bagheri Kani, defendió la necesidad de poner fin al ‘genocidio’ israelí en la Franja de Gaza, en una conversación telefónica con el primer ministro y ministro de Exteriores de Catar, el Jeque Mohammed bin Abdulrahman bin Jassim Al Thani.
“Hice hincapié en la necesidad de continuar con todos los esfuerzos y medidas prácticas, incluidas actividades diplomáticas, para detener el genocidio sionista (israelí) en Gaza”, afirmó Bagheri Kani el viernes en la red social X, en referencia a la conversación telefónica con su homólogo catarí a última hora del jueves.
Las partes hablaron sobre la reanudación de las negociaciones en Doha para alcanzar una tregua en la Franja de Gaza, bajo mediación del anfitrión Catar, Egipto y Estados Unidos y con la participación de una delegación israelí.
Sin embargo, el movimiento islamista palestino Hamás, que tiene su oficina política en la capital catarí, dijo que no participa en las conversaciones, si bien se mostró abierto a reunirse con los mediadores, en especial Catar y Egipto, en caso de que haya avances.
Las negociaciones, que según el jefe de la diplomacia de Catar, se encuentran en una fase ‘delicada’, continuarán, mientras el Ejército israelí mantiene su ofensiva en la Franja de Gaza, donde los muertos ya superan los 40.000.
La guerra en Gaza se desató después del ataque del 7 de octubre del 2023 de Hamás y otras milicias palestinas contra el territorio israelí, que causó la muerte de 1.200 personas y el secuestro de otras 250.
La República Islámica de Irán, que es un enemigo acérrimo de Israel, capitanea el llamado ‘Eje de la Resistencia’, una alianza informal antiisraelí, conformada además de Hamás, por el Hizbulá del Líbano y los hutíes de Yemen, entre otros.
Irán incluso ha prometido vengar el asesinato del líder de Hamas, Ismail Haniyeh, durante una visita oficial en Teherán el 31 de julio, que las autoridades iraníes han atribuido a Israel.