Así quedó establecido en una mesa de trabajo realizada entre la Agencia Nacional de Infraestructura, Covioriente y las comunidades afectadas por las obras de ampliación de la doble calzada entre Yopal y Aguazul y la ampliación entre Aguazul y Villavicencio.

En esta mesa de trabajo se lograron varios acuerdos, entre ellos, el diseño y construcción del acceso vehicular directo al sector de la Colina Campestre, unidad residencial de estrato alto que requiere de una especie de intercambiador vial que permita entrar y salir del área de manera despejada.
Igualmente, informaron los voceros a Boyacá Sie7e Días que, por ahora se tiene asegurada la construcción de unos andenes y el paso elevado para el ingreso de los estudiantes a las instalaciones de las instituciones educativas que se encuentran en el trayecto de la vía.
Así mismo, se logró que en el Centro de Hipoterapia, muy cerca al casco urbano de Yopal, se adecuen los espacios pavimentados para facilitar el acceso de los niños y las personas que deben acudir a las jornadas terapéuticas, puesto que allí se atiende a pacientes con dificultades de movilidad.
Los voceros de las comunidades fueron enfáticos en afirmar que, la etapa que se avecina es la apertura del cobro de los peajes entre Yopal y Aguazul y el del puente del Tacuya, este último, en el tramo Aguazul-Tauramena-Villanueva, los cuales no se permitirán hasta tanto las comunidades aseguren el cumplimiento de los compromisos pactados, tanto con las agencias del Estado como con los concesionarios de la obra.

De acuerdo a los términos planteados, la apertura del cobro de los peajes se daría en un plazo no mayor a seis meses, tiempo en el cual se deben cumplir a satisfacción los acuerdos entre las partes, es decir culminar las obras inconclusas o que están pendientes de ejecución.
Los dirigentes ciudadanos se han venido quejando por el número de peajes que se instalaron en el tramo Yopal-Villanueva, tres en total, que según ellos resulta demasiado oneroso para la economía de quienes deben transitar esta vía.