Incendios forestales, deforestación de bosques, inadecuado manejo de los residuos y desprotección de flora y fauna, son las problemáticas que tiene esta área protegida, por lo que el alcalde de Samacá indicó que este páramo requiere mayor atención.
La Alcaldía de Samacá lanzó la campaña ‘Samacá es agua, cuidemos nuestro tesoro natural más valioso’, en la cual la participación de la comunidad es fundamental para que se privilegien los ecosistemas y sus servicios, asimismo, para garantizar la vida y el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible y la lucha contra el cambio climático.
“En el Día Mundial del Agua, realizaremos actividades de educación ambiental, jornadas de limpieza, actividades culturales, reforestación y recuperación de fuentes hídricas como la quebrada del Chulo”, explicó el alcalde de Samacá, Wilson Castiblanco Gil.
Sumado a estas iniciativas, inició la recuperación del canal Teatinos que suministrará agua a más de 400 familias, que se dedican a la agricultura y que por el fenómeno de El Niño hoy tienen dificultades para el regadío de cultivos.
“Hoy desde Samacá, enviamos un mensaje en defensa del agua, de los ecosistemas para cuidar los recursos naturales y para proteger la vida”, dijo el alcalde.
De igual manera, hoy, 22 de marzo, en el Día Mundial del Agua, el mandatario municipal de Samacá hizo un llamado a las autoridades ambientales, al Gobierno nacional y al Congreso de la República para proteger estos ecosistemas estratégicos en Boyacá y Cundinamarca.
“Es necesario que se establezcan lineamientos para conservar, preservar y recuperar ecosistemas de alta montaña, páramos y áreas protegidas”, afirmó el alcalde Wilson Castiblanco.
El páramo Rabanal-río Bogotá beneficia a los municipios de La Capilla, Pachavita, Ráquira, Samacá, Turmequé, Úmbita, Ventaquemada, Chocontá, Guachetá, Lenguazaque, Machetá, Tibirita y Villapinzón, de los departamentos de Cundinamarca y Boyacá. Tiene una extensión de 24.650 hectáreas, de las cuales 4.530 son de Samacá.
Este ecosistema de páramo y bosque andino es fuente de agua para más de 150.000 habitantes, cuya importancia hídrica y biodiversidad es altamente reconocida por la comunidad científica del país.