Preocupado y sin agua. Estresado y sin poder tramitar las citas médicas. Caen chubascos y no llegan a los cerros ni a los páramos. Gran auge del ciclismo y presencia de las figuras en las tierras boyacenses. Llegan 30 carrotanques y se hace invasión del “Altar de la Patria” y nadie dice nada.
Que el rey tiene cáncer. Que todos hacen minivideos y ya son medios de comunicación. Que si hace comentarios sobre el mesías es declarado no amigo y por ende hay que alejarlos. En fin, estamos en una ‘vaca loca’ en todos los niveles y con preocupación ahora se anuncia una “ruptura institucional” que golpea o permea a millones de compatriotas pero que mejor dejar el tema a los centros de poder, que mañana saldrán a defender unas peroratas que ni sus ideólogos logran desenredar…
Juegan con titulares de supuestas prórrogas del cese al fuego para otros 6 meses de búsqueda o legalización de dineros para sus fechorías con las gentes de bien. Pero lo que parece servir para polarizarnos, y que pena tener o recurrir o poner el terminillo de nuevo, pero es que esto ya pasó a los límites que pregonamos en su momento y hoy ya cuajaron con ataques desmedidos y groseros, llamados a movilizaciones para presionar no para solucionar. Y algunos soterrados siguen incitando al desacato de leyes y la constitución y hasta haciendo show regional para trascender a lo nacional.
Muchos sectores reclaman “guerras legales” pero hacen sus jugaditas y dejan a las bases, a sus soportes, al garete y al ver las encuestas recurren a convocarlos, invitarlos, motivarlos, para que se ponga la camiseta de lo institucional y a defenderlo a como dé lugar (por las buenas o por las malas…) que aquí se convierte o traduce en defensa del ofensor, que se siente ofendido, por ofensores de oficio o por demócratas de cuatrienio, con armas pacíficas y debilitando a unos rivales de hielo, invocando la voluntad popular (¿recuerdan al líder del poder popular?) y así en todo.
No seguir confundiendo o remitiendo mensajes en idiomas extranjeros para satisfacer o decir que es lo que se viene buscando en nuestros entornos, pues ya es hora de poner las tildes en el lugar preciso, para que devolvamos la majestuosidad de la ley, de los respectivos poderes, a quienes se les otorgó la gracia de ser quienes impartan la sapiencia de la justicia, duélale a quien le duela, se crean las nuevas embajadas, se nombre a los mismos de las peleas y se burlen de la nación.
Se vienen anunciando un censo y allí todo girará para justificar una economía popular y ojalá en esas preguntas se incluyan las que deberían dar líneas en políticas públicas para no darle juego a los que buscan recurrir a la metanoia, sino que mediante apego a lo institucional jurando defender- se haga.
Las burlas a los comparendos cívicos es el más vivo ejemplo que si para componer o remediar las infracciones y si eso sucede con las pequeñas cómo será cuando ya subidos en el poder se conviertan en sus propios verdugos, arrastren a incautos y por ahí derecho nos pongan en conflictos absurdos.
*Por: Ricardo Gabriel Cipagauta Gómez. @ricardocipago