Era la foto que muchos querían ver: los mismos líderes que compitieron por la alcaldía de la capital boyacense, los nueve que libraron una enconada disputa por los votos, trabajando en equipo.
Hasta el mediodía de este viernes se extendió la reunión en la que los ocho excandidatos compartieron con el alcalde y su equipo su visión sobre el municipio, sus problemáticas y las propuestas que cada uno tenía para solucionar líos puntuales.
Desde luego que el programa de gobierno que radicó Mikhail Krasnov en la Registraduría se debe convertir en el Plan de Desarrollo, pero si así lo determina el burgomaestre con su equipo, varias de las visiones de los excandidatos serán para utilizarlas como una perspectiva en el gobierno municipal.
Una de las peticiones en las que coincidieron los excandidatos fue que les presentaran la proyección presupuestal del municipio.
Y se refirieron a macroproyectos que ya están aprobados en el Plan Nacional de Desarrollo: el Sistema Estratégico de Transporte Público; el mejoramiento en las condiciones de movilidad de la glorieta norte; la construcción de la sede del Sena; la ejecución del módulo quinto de la Ptar, el mejoramiento y dotación de la Policlínica y la construcción de la sede para la Esap.
Desde luego que, aunque estos proyectos ya están aprobados en el gobierno nacional, se deben gestionar las contrapartidas que le piden al municipio para que estos sean una realidad y por eso el interés de algunos de los candidatos como César López o Vicente Aníbal Ojeda, en saber el estado presupuestal del municipio.
De igual manera el Plan de Ordenamiento Territorial también es urgente y fundamental. Su documento ya está siendo objeto de estudio en el Ministerio de Ambiente, pero tiene que regresar a Corpoboyacá y luego al concejo municipal para su aprobación.
De esta manera, el alcalde Mikhail Krasnov y su equipo de gobierno, escucharon a los candidatos y les recibieron sus propuestas. Claro que no todo fue paz y tranquilidad. En varios momentos, los excandidatos fueron críticos y dejaron sus inquietudes planteadas.
Lo cierto es que independientemente de qué tanto de las sugerencias, aportes y críticas vaya a utilizar el gobierno del alcalde Krasnov en la elaboración de su carta de navegación, el haberse sentado a trabajar entre todos ya es un hecho histórico para la capital boyacense.