Pocos lo saben, pero una de las debilidades del alcalde electo de la capital boyacense es el sol. Literalmente por lo mono, de piel blanca y ojos verdes, el mandatario de origen ruso tiene serios problemas con los rayos del astro rey.
Pues ayer, durante gran parte del acto de posesión el sol canicular agobió hasta a los que estaban como invitados bajo las tres carpas ubicadas en la plaza de Bolívar, pero el mandatario electo por estar en la mesa principal, quedó expuesto a los fuertes rayos que al final del evento ya lo tenían literalmente como un camarón.
Trataba de cubrirse el rostro con la palma de la mano, tomaba agua y hasta se abanicaba con una hoja, pero nada de esto le sirvió para no pegarse semejante quemada en su rostro.
Y es que finalmente fueron casi tres horas expuesto al sol. Habrá que comenzar a usar sombrero, cachucha o sombrilla y eso sí mucho bloqueador señor alcalde, porque el verano que se le viene encima va a estar como largo y fuerte.