El senador del Centro Democrático se refiere a la ley que es de su autoría, al Gobierno del presidente Gustavo Petro, a la situación del departamento de Boyacá y a la campaña política que ya está tomando temperatura.
Usted es el autor de la ley que fortalece la cadena productiva del fique, ¿cuéntenos qué significa esta iniciativa y a quiénes va a beneficiar?
Yo vengo de una región que es frontera de Boyacá con Santander y el fique es un producto importante para el ingreso de muchas familias santandereanas, y a raíz de la promoción de la Federación Nacional de Fiqueros comenzamos a trabajar en el proyecto de ley, a redactarlo. Lo radiqué en el Congreso de la República hace dos años.
¿Cómo fue ese proceso para elaborar el proyecto de ley?
Estuve en tres congresos nacionales de fiqueros, donde me ayudaron y me apoyaron con la parte técnica del proyecto de ley, y visibilizando las dificultades que tiene el sector para más de 70.000 familias que hoy dependen del fique en todo el país, de todos los departamentos concentrados en unos más que otros.
¿Qué tanto depende Boyacá de la producción del fique?
Boyacá es un departamento donde varias familias producen el fique, pero son Santander, Cauca y Nariño los departamentos que más trabajan este producto.
¿Qué lo motivó a trabajar en ese proyecto de ley, senador?
En este momento en el mundo en que hablamos tanto del medio ambiente, el fique reemplaza el plástico para el empaque de muchos productos del campo. Entonces, es un proyecto de ley que vuelve a crear la cadena productiva del fique y que, además, obliga a alcaldes, gobernadores y a la Nación a generar planes, proyectos y programas para que dentro de los planes de Gobierno esté siempre la producción del fique y además la cadena productiva en el Ministerio de Agricultura del fique y a ProColombia obligar a encontrar mercados extranjeros para el fique.
¿Cómo fue votada esa ley en el Congreso de la República?
Esta es una ley de la República que en los pasados días tuvo el acompañamiento unánime de todos los partidos políticos, una ley de mi autoría que cursó los cuatro debates y ahora vamos a tener el Congreso del Fique en Popayán en el mes de noviembre, donde nos dicen que el presidente Petro va a ir a firmar, a sancionar la ley que es de nuestra autoría.
¿Qué siente de ver ese proyecto convertido en una ley?
Esto es algo muy representativo, porque vemos que la mayor cantidad de productores son campesinos muy humildes, pero también hay empresas que están transformando el fique en empaques y en unos subproductos que pueden llegar a ser también biocombustibles, y una gran cantidad de potencial que tienen los derivados del fique para hacer una alternativa de ingresos de las familias colombianas.
¿Es decir que esta también es una ley que va a fortalecer empresas para generar empleos?
Hace poco me llamaban de Nariño de una empresa que tiene 85 empleados, donde ellos transforman el fique para muchos empaques y exportan el empaque para Ecuador, Perú, Chile y Argentina, y querían invitarme a la empresa para que se dieran cuenta de lo que yo estaba ayudando con ese proyecto de ley a la empresa, a sus empleados y, sobre todo, para la promoción por parte de la Gobernación de Nariño y a la Nación con todas las ayudas que les van a dar a raíz de lo que viene en el proyecto de ley.
¿Qué más leyes ha impulsado usted en el Congreso?
Esta es nuestra sexta ley y entre esas está la que congeló el impuesto predial, que fue noticia nacional, que es importante para que el predial no crezca más de lo que crece el bolsillo de los colombianos y eso es importante también, pues sobre todo para mitigar el impacto del predial que ha crecido mucho más de lo que ha crecido la inflación en los últimos 25 años.
Senador, cambiando de tema,¿cómo ve el futuro de Colombia?
Yo estoy un poco preocupado porque el Gobierno no ha entendido que ya no es oposición, ya no está en el activismo y ya tienen que dejar de decir y dedicarse a hacer, tienen que gobernar y si siguen con esa negligencia y con esa terquedad, van a perder una muy buena oportunidad que tenía la izquierda para demostrar que sí podían administrar bien. Desafortunadamente para el país, porque yo no soy mezquino, yo no soy como la izquierda que en el Congreso le apostaban a que Duque no vacunara para que le fuera mal a la derecha y ellos ganar la Presidencia. A mí no me importa que a Petro le vaya bien, porque si a Petro le va bien, nos va bien a todos, pero desafortunadamente no han podido compaginar, articularse, y se han dedicado a buscar enemigos y a victimizarse y no han administrado.
Necesitamos administración de este país, necesitamos solución a los colombianos, la carreta ya se la comieron, ganó por poco, pero ganó, pero acá tienen que entender algo y es que tienen que administrar bien y administrar bien es encontrarles soluciones a los problemas que hoy tiene Colombia, la carreta ya no se la comen, se la comían cuando eran oposición, pero ya cuando están administrando tienen que hacer y ellos no han entendido y lo que pasó con las marchas es un mensaje muy importante que no es para derrocarlo, no es para acabar el Gobierno.
¿Las marchas que se realizaron la semana pasada eran para atacar al presidente Gustavo Petro?
Nosotros no queremos atacar al presidente, nosotros queremos defender a Colombia y para eso hay que respetar las instituciones y como tal la Presidencia de la República, que la respetamos, pero eso no quiere decir que él sea negligente en no reconocer que hay colombianos preocupados y que los de la oposición estamos listos para trabajar con él, para construir, no quiere decir que dejaremos de hacer oposición, vamos a hacer la oposición los cuatro años. Aquí no nos vamos a vender por un puesto, por un ministerio, no, la oposición la vamos a hacer los cuatro años, pero aún desde la oposición podemos construir el país diciéndole al Gobierno que podemos concertar una reforma laboral que necesita Colombia, no esta que presentaron, pero una que necesita Colombia; una reforma a la salud se necesita en Colombia, no esta que presentaron, pero estamos listos para trabajar en una. Entonces el Gobierno tiene que entender que se le acabó la época de activismo y que hoy es el presidente y hoy es el Gobierno y hoy tiene el sartén por el mango y tienen que administrar bien porque se la van a cobrar en el 2026.
¿Realmente existe un golpe blando contra el presidente Petro?
Si existiera algún golpe blando debería llamarse autogolpe blando, porque todos los escándalos han sido por el hermano que visitaba las cárceles, por el hijo que recibió plata de narcotraficantes, por su persona más cercana en la campaña, que era Armando Benedetti su embajador en Venezuela, la jefe de Gabinete, que antes llamaban superministro, ese cargo más importante en todo el Gobierno nacional, que salió por este escándalo, entonces si es un golpe blando debería llamarse autogolpe blando.
¿Qué es lo que más le preocupa a usted en este momento?
Me preocupa el empleo, me preocupa la economía, me preocupa la salud de los colombianos y la seguridad que está deteriorada en todo el territorio nacional, y no veo políticas claras a mediano y largo plazo por parte del Gobierno para dar soluciones a esto.
Arrancamos una nueva campaña política regional, ¿cómo ve en este momento al departamento de Boyacá y cuál sería el gerente adecuado para la situación actual?
La alternatividad del poder oxigena, es positiva para la democracia y creo que de esa misma manera debemos pensar para Boyacá la alternatividad. En Boyacá también se debe oxigenar la política por el bienestar de los boyacenses y por el futuro de nuestro departamento. Creo que es importante que gane alguien diferente al Partido Verde en Boyacá, creo que ya tuvieron su oportunidad y no han demostrado obras de impacto. Desafortunadamente los departamentos y las entidades territoriales no tienen los recursos suficientes, siempre vendrán del Gobierno nacional y la última obra importante para Boyacá tiene que llamarse la doble calzada que dejó Álvaro Uribe, desde eso no he visto una obra de impacto para el desarrollo del departamento. Tuvimos que esperar que Iván Duque llegara para hacer una inversión de 2,6 billones de pesos, con un mensaje negativo que fue que llegó a siete vigencias anuales que, obviamente, deteriora la inversión y demora esos 2,6 billones de pesos para conectar el departamento con el país, con las vías Labranzagrande –
Yopal, la variante de Sogamoso, Duitama – Charalá – San Gil, Socha – Sácama – La Cabuya, la doble calzada a Chiquinquirá y Chiquinquirá – Otanche – Puerto Boyacá. Todo esto se va a demorar siete años, ojalá este Gobierno pueda acortarlo a tres años.
¿Y cómo ve a Boyacá?
Llevamos dos Gobiernos verdes en los últimos ocho años, sin obras de impacto, sino con una carreta que ha convencido a muchos del pesar, de la víctima, del pobrecito de la ruana que se la tejió la abuelita y eso no genera empleo, eso no genera inversión en el departamento. Yo quiero un gobernador que piense en que le hable a inversionistas extranjeros o nacionales para que vengan y traigan sus empresas a Boyacá, que produzcan desde Boyacá, que hable con un Gobierno, con una buena comunicación para que traiga inversiones importantes y de impacto. Si nosotros no generamos desarrollo para Boyacá con obras de impacto que hagan ver a Boyacá con buenos ojos, pues vamos a seguir siendo un departamento ahí de mediana tabla en ingresos, en el PIB, en emprendimiento. Necesitamos obras de impacto, porque yo creo que nos dimos cuenta cómo cambió la cara de Boyacá con la doble calzada. Ahorita vamos a hablar de una triple calzada.
¿Qué requiere el departamento entonces?
Boyacá tiene una oportunidad de poder darle una alternativa y que gane alguien diferente al Partido Verde, para que oxigene la política, para que veamos nuevas caras y nuevos horizontes y que administren bien el departamento.
¿La ruana está desgastada como símbolo político?
Por lo menos el mensaje lo tienen que cambiar porque ya el cuento no se lo van a comer. El cuento de Carlos Amaya de la ruana ya no convence cuando ha vivido en Europa, cuando realizó su matrimonio en Villa de Leyva, algo que muy pocos colombianos podrían realizar, cuando estaba de asesor de Milpa, cuando estaba de asesor de Acerías PazdelRío, cuando vemos una casa de más de miles de millones de pesos en Paipa, cuando vemos que contratistas les mandan el cableado como lo dijo la revista Cambio, cuando vemos que Corpoboyacá hace una delimitación y coincidencialmente hace un huequito para que no quede la finca del suegro, pues son temas que dejan muchas preguntas y yo creo que ya estuvo bueno, es bueno ver nuevas caras en el departamento.
¿Cuál es su mensaje para los boyacenses?
Yo pienso que Boyacá tiene mucho potencial, pero creo que tenemos que saber priorizar las inversiones. Hoy uno de cada cinco boyacenses en Boyacá depende directamente de la minería. Hoy tenemos un Gobierno con un ataque directo, sistemático, hacia la minería y si eso se tiene concentrando, el primer departamento que va a sufrir va a ser Boyacá. Tres de cada cinco boyacenses viven indirectamente de la minería. Nosotros tenemos que proteger nuestra fuente de ingresos que es la agricultura, el medio ambiente, la minería el turismo y a eso hay que mirar cómo priorizamos inversiones y desde el Gobierno nacional articulado con la Gobernación departamental. Yo la verdad he tenido muy poca relación con el gobernador actual, pero veo que pasó cuatro años sin pena ni gloria, veo que es un gobernador que no hizo absolutamente nada por el departamento, lo vi apagado completamente en el Gobierno de Duque y lo veo completamente apagado con el Gobierno de Petro. Perdimos cuatro años de impulso de nuestro departamento y creo que el mensaje es que independientemente sea su escogencia, escoja bien, porque a Boyacá le puede ir muy bien si tenemos obras de impacto y si tenemos personas que levanten la voz y le frieguen la vida al Gobierno nacional desde donde estén, desde los medios de comunicación, desde el Congreso, desde la alcaldía, desde donde estén para que a Boyacá nos miren y para eso necesitamos que escojan muy bien este próximo octubre.