Un caso de violencia intrafamiliar tuvo en alerta máxima a las autoridades durante un poco más de dos horas y hasta el mediodía en la capital boyacense.
“En el barrio José Antonio Galán tuvimos que atender un caso originado en una pelea de esposos, en el que al percatarse de que habían llegado los uniformados, el hombre se intimida y coge al niño y un arma blanca y se encerró en el cuarto”, explicó el coronel Fredy Pérez, comandante de la Policía Metropolitana de Tunja.
Y añadió el oficial que luego de sacar a la esposa del hombre de la casa, se activó un grupo interdisciplinario integrado por comisaría de familia, psicólogo, médico, para hablar durante dos horas con el hombre que está afectado psicológicamente.
“El problema se suscita en un problema de una relación de pareja, en el que ella viene y lo agrede, le dice cosas y lo amenaza con irse del hogar, entonces sí hay un problema familiar fuerte”, aseguró el oficial.
El coronel les agradeció a los vecinos que dieron alerta oportunamente y añadió que al niño se le van a reestablecer los derechos, ya que la comisaría de familia está buscando un acudiente para entregarlo, porque es un hogar inestable, hasta que se tome una determinación con familia.
Por su parte la comisaria de familia María Ester Soler Plazas dijo que se logró el resultado a través de un trabajo articulado entre diferentes instituciones y que ahora les brindarán atención a los tres.