“Se lamenta el fallecimiento de los veintiún (21) mineros, toda vez que su muerte llena de congoja y pesadumbre a la ciudadanía del municipio. En mérito de lo anteriormente expuesto, el Alcalde de Sutatausa decreta tres días de duelo”.
El texto hace parte del decreto municipal con el que se rinde homenaje a los fallecidos luego de la explosión del pasado 14 de marzo en al menos 6 minas en la vereda Peñas de Cajón, debido a la acumulación de gas.
Después de más de 24 horas de operaciones de rescate, las autoridades de Cundinamarca informaron que la explosión de varias bocaminas, dejaba un saldo de 21 mineros sin vida. El accidente minero, uno de los más grandes que se ha registrado en Colombia en su historia, llevó el luto a 21 familias de diferentes partes del país.
Pues entre los fallecidos, estaban los boyacenses: Luis Enrique Vargas Álvarez, de Santa Rosa de Viterbo (primero en la foto); Julián David Corredor Puentes, de Moniquirá (segundo en la foto), y Víctor Alfonso Nonsocua Gaitán, de Mongua (tercero en la foto).
Al funeral del santarroseño que se cumplió el sábado en su tierra natal, asistieron su mamá, María Ana de Dios Álvarez; su hija, Angie Ximena Vargas; sus hermanos Graciela, Pablo Agustín, Luz Miriam, Carlos, Janeth y Claudia, su compañera Dora Isabel, su yerno, cuñados y demás familiares.
El moniquireño, era oriundo de la vereda San Vicente Alto, y deja a su esposa, Diana Rodríguez, quien está próxima a dar a luz a Juliana Antonela Corredor Rodríguez. Julián David Corredor Puentes Tenía 27 años y era el hijo menor de su padre ya había fallecido y Gloria Esperanza Puentes. Trabajó durante varios años en trapiches, pero se fue por una mejor paga a las minas de Sutatausa.
Lo trajeron a Moniquirá el jueves a la 1:00 de la tarde y fue recibido en cercanías a Barbosa en una multitudinaria caravana de familiares, amigos y conocidos. Su sepelio fue el viernes a las 2:00 de la tarde, con la basílica llena y luego los trasladaron al cementerio local.
La tercera víctima mortal oriundo de Boyacá, fue Víctor Alfonso Nonsocua Gaitán, de 38 años de edad quien finalmente arribó a su tierra natal ubicada a 45 minutos de Sogamoso, en la madrugada de este viernes para lo que sería su velorio y honras fúnebres.
Sus padres y hermano menor decidieron que su velorio se realizara en su casa en el sector de Duzmón, en zona rural del municipio de Mongua, donde nació y se crío, precisamente hasta donde había llegado a mediados de enero pasado en lo que sería su última visita a su familia.
El hombre era el mayor de los dos hijos de Ernesto Nonsocua y de doña Martha Gaitán, y vivía en Bogotá con su esposa que trabaja en una empresa farmacológica hacía un poco más de dos años con sus dos hijas una de 13 y una de 10 años.
Víctor Alfonso estaba a punto de completar tres años trabajando en la empresa denominada Sociedad Minera Rodríguez, que se dedica a la explotación de carbón y propietaria de uno de los túneles afectados por la explosión que se registró la noche del martes pasado, en esa localidad vecina de Ubaté.
Al momento de la explosión en el interior de las minas se encontraban 30 trabajadores, siete de los cuales lograron salir a la superficie por sus propios medios y salvaron sus vidas. El grave accidente dejó 21 víctimas fatales incluidos estos tres boyacenses.
