Un libre pensador que incomodó que utilizó la poesía para levantar la voz aunque fuera perseguido y hasta desterrado, un boyacense que aunque partió a la eternidad hace 100 años, logró inmortalizarse en sus versos, en cada uno de sus escritos.
Y desde luego que, en esta importante fecha, Boyacá Sie7e Días les trae una selección de artículos, columnas de opinión y hasta una galería de fotografías inéditas, al igual que los pormenores del evento central que comenzó desde ayer y que se extenderá durante todo el día en Usiacurí (Atlántico), tierra en la que murió el poeta chiquinquireño el 7 de febrero de 1923.
Pues mientras en Usiacurí se recuerda la muerte de semejante personaje en un evento que convoca a los gobiernos de Atlántico y Boyacá en una manifestación cultural y de homenaje, usted podrá ir consultando uno a uno los artículos publicados en Un siglo sin Julio Flórez Roa.
Volver la mirada por encima del hombro y mirar el sendero recorrido, es una de las delicias celestiales del ser humano.
Allí, es precisamente donde encuentra dos inevitables senderos: uno correr a la añeja versión oficial de Henao y Arrubla o el Hermano Justo Ramón, colgada en las estanterías polvorientas y entelarañadas de las bibliotecas del pueblo.
El otro: correr por los vestigios reales de recuerdos ancestrales, guardados en las memorias de los viejos o en los archivos familiares que guardan celosamente la realidad de los hechos, muchos de ellos conservando todavía aromas de sentimientos impregnados de alegrías, lágrimas y tristezas, de romances colgando notas sentidas en los balcones de la amada, implorando citas clandestinas, así se cometiera sacrilegio en la penumbra del confesionario, o entre los duraznos del florido huerto.
Por eso, en esta segunda entrega del especial, sobre la vida y obra del Bardo Don Julio Flórez Roa, se presenta la realidad cercana a los hechos, la que conserva el corazón de la familia, y se acompaña con el sentimiento y el pensamiento que no olvida a su poeta, uno de los grandes que se enseñoreó en el alma del pueblo, el Julio Flórez que no se quedó en el pasado, sino que vive en todos los tiempos, el que quisieron apagar y solo lograron hacerlo más fuerte.
Aquí encontramos en este especial documentos guardados y presentados por las familias Flórez La Rotta, Carrillo Flórez y Olmos Flórez, igual que la mirada objetiva de Rafael Carrillo Flórez, expresada en una prosa que atrapa, divierte y enseña, es estirpe, herencia que identifica el sello de familia, con el increíble sabor, que así se desgrane la lluvia del tiempo, jamás lo perderán porque pareciera ser genética Flórez, poesía y versos, amores, magia e ilusiones.
También nos acompaña la visión clara, trabajadora y comprometida con la vida y obra de Don Julio Flórez Roa, de la Alcaldesa Katherine Pasos, la directora del Museo Flórez Margarita Macias, la directora del ‘Festival Flórez Frente al Mar’ Isigra de la Vega, igual que el alcalde de Chiquinquirá Wilmar Triana, y el valioso pensamiento sobre el Poeta de Académicos y gestores culturales y escritores como la doctora Luisa Ballesteros.
Qué tal las fotos que nos dejan hoy ver, varias de ellas por primera vez, y qué tal el relato que nos hace el historiador Hernán Olano sobre Julio Flórez y José María Vargas Vila o la remembranza de Omar Coy. En fin cada uno de quienes aceptaron esta invitación, nos ayudan a conmemorar una fecha tan importante, precisamente contándonos, trasladándonos y explicándonos la importancia de semejante personaje de Boyacá para el mundo.