“No saben cómo nos van a cambiar la vida, no se lo alcanzan a imaginar, por fin se va a hacer realidad nuestro sueño de tener una casa propia, y todo gracias a Comfaboy, este día jamás lo vamos a olvidar”.
La frase es de la señora Margarita Chaparro, una de las asistentes al evento en el que la Caja de Compensación Familiar de Boyacá, entregó 120 subsidios de vivienda a trabajadores afiliados a las categorías A y B que cumplieron con los requisitos para este apoyo.
Precisamente, el evento que contó con la junta directiva de la Caja en pleno, convocó a decenas de familias de diferentes partes del departamento, los mismos que fueron testigos de la entrega de las carta-cheques que les confirmaba el desembolso del dinero para su techo propio.
Uno a uno fueron pasando los beneficiarios, con sus respectivas familias para lo que sería una escena inolvidable para todos los asistentes, una fecha histórica para todos, para las 120 nuevas familias que en los próximos días por fin tendrán una propiedad para vivir.
“Para mí es un tema fundamental el subsidio de vivienda, ya que yo mismo viví en una casa de interés social que en su momento les entregaron a mis padres en Chiquinquirá con un subsidio y crédito y yo me imagino la cara de mi papá y mi mamá, como la de ustedes hoy, cuando les entregaron ese subsidio de vivienda”, dijo Fredy Garcíaherreros.
El director de Comfaboy, añadió que los requisitos son mínimos para poder acceder a este tipo de subsidio: que esté afiliado a Comfaboy con mínimo tres meses de antigüedad, que no tenga vivienda a su nombre, que el núcleo familiar no exceda los cuatro salarios mínimos de ingreso mensual, que antes no haya sido beneficiario de algún subsidio de vivienda.
En el 2021, Comfaboy entregó 2.200 millones de pesos en subsidios de vivienda; en el 2022, fueron 7.893 millones de pesos y este año esperan superar los 8.000 millones de pesos.
El director de la Caja de Compensación Familiar de Boyacá añadió que el subsidio urbano es hasta de 30 salarios mínimos legales vigentes y que el subsidio rural, es hasta de 70 salarios mínimos vigentes legales, lo cual es una muy buena noticia para los boyacenses, pues en este departamento -señaló-, se tiene la cultura de que se debe tener una casa o un apartamento, que esa es la mejor herencia para una familia y no esperar hasta tener los 100 millones de pesos ahorrados para poder comprar un techo.
“Todos los que estamos acá, hemos podido acceder a una vivienda, gracias a un crédito, porque consideramos, como efectivamente lo es, que el tener un techo propio, nos cambia, nos mejora nuestra calidad de vida”, recalcó el director de Comfaboy en el evento que contó con el auditorio lleno.
