¿Cómo los drones aportan más seguridad a la agricultura?

El uso de drones es una práctica sostenible, concebida para gestionar los recursos naturales de manera eficaz y disminuir el impacto de la agricultura en el medio ambiente. 

Los drones son hasta 50 veces más rápidos en la aplicación de productos químicos de protección de cultivos que el pulverizador de mochila típico, lo que reduce no solo el tiempo sino también el costo invertido en tratamientos. Foto: Archivo Particular.

Uno de los retos de mayor relevancia que hoy enfrentan las industrias es la producción de alimentos para la población actual del planeta, que ya supera los 7.600 millones de personas, y según estimaciones de Naciones Unidas, en el año 2.030 existirán 8.600 un 14% más de personas para alimentar. Como respuesta a este panorama, se está desarrollando con éxito la agricultura inteligente o ‘Smartfarming’, un concepto que se fundamenta en no desperdiciar nada: ni terreno, ni productos, ni recursos vitales como el agua.  

La digitalización y en particular la tecnología de drones tiene el poder de transformar la agricultura. Esta innovadora implementación de aplicación puede cambiar uno de los trabajos más exigentes físicamente en el sector agropecuario. Los productores, en general, están envejeciendo y trabajar en la agricultura parece estar convirtiéndose en una opción de trabajo menos atractiva para los jóvenes. Así mismo, el acceso a la innovación de vanguardia y las tecnologías digitales no solo puede contribuir a ganarse la vida de una mejor forma, sino que también ayuda a que la agricultura sea más atractiva para las generaciones jóvenes. 

Esta es una práctica sostenible concebida para gestionar los recursos naturales de manera eficaz, y disminuir el impacto de esta actividad en el medio ambiente. “Al hacer las aplicaciones de productos –agroquímicos y fertilizantes- de forma directa y precisa, no habrá residuos que contaminen la tierra y el agua. De esa manera, se disminuyen, por ejemplo, los gases de efecto invernadero, la deforestación y se utiliza mejor el recurso natural”, explica Fernando Mora, coordinador de Gestión de Producto de Soluciones para la agricultura de BASF en Colombia y Ecuador. 

Uno de los ejemplos de adopción de agricultura de precisión es la recolección y el análisis de datos que le permite al agricultor, además de monitorear mejor sus cultivos, predecir y detectar anomalías en ellos. “A través de algoritmos e inteligencia artificial es posible calcular hasta en un 99 % la presencia de enfermedades y malezas. Esto, sin duda, es una gran ventaja en temas de productividad”, explica el experto. Además del beneficio ambiental, el uso de la agricultura inteligente derivará en ahorros y una producción sostenible al optimizarse los procesos. 

Pioneros en los drones llevan la digitalización al campo 

Hernán Camilo González, coordinador de proyectos para la región Norte de Latinoamérica (LAN) de la división de Soluciones para la Agricultura de BASF, explica: «Nos enfocamos en traer prosperidad a las áreas rurales. Se trata de cómo podemos ayudar a los pequeños y medianos agricultores a convertirse en empresarios, cerrando la brecha de innovación o tecnología para que puedan ser más eficientes. Todo esto es factible a través de drones. Con este proyecto y la red de socios que hemos establecido, vamos a encabezar el cambio de la aplicación de mochila a los drones«. 

Los drones son hasta 50 veces más rápidos en la aplicación de productos químicos de protección de cultivos que el pulverizador de mochila típico, lo que reduce no solo el tiempo sino también el costo invertido en tratamientos. Esto permite a los agricultores completar el trabajo en un cierto período de tiempo con las condiciones climáticas y ambientales ideales, lo que genera una eficacia uniforme de los productos de protección de cultivos en el campo.  

«En nuestra experiencia, la aplicación de drones necesita hasta un 90% menos de agua que los pulverizadores de mochila, lo que ayuda a los agricultores a producir no solo más, sino a conservar mejor los recursos vitales, particularmente en áreas con escasez de agua«, Finaliza Camilo. 

Esta tecnología de drones ya está siendo utilizada en la agricultura en otras partes del mundo. Sin embargo, aún carece de un claro marco legal local. BASF Soluciones para la Agricultura también está apoyando proyectos piloto en otros mercados como China y Tailandia, mediante la creación de redes para reunir a agricultores, proveedores de servicios de drones y consultores agrícolas, entre otros. 

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