Aterrizó en una avioneta a las 4:00 de la tarde en el aeropuerto de Paipa, donde lo esperaba un convoy que lo trasladó de una vez a Tunja para cumplir con tres citas, sin embargo, la agenda se le retrasó aún más de lo que ya venía, porque a la entrada de Tunja lo esperaba una caravana de simpatizantes, que terminaron colapsando el tráfico.
A las 5:52 de la tarde finalmente pudo ingresar a una reunión en un edificio contiguo al centro comercial Unicentro, donde habían convocado a un grupo de periodistas desde las 4:30 de la tarde y allí se dio el acto de adhesión de la senadora electa Carolina Espitia, la actual representante a la Cámara, Neyla Ruiz y el también electo representante Wilmer Castellanos, al igual que de otros congresistas electos por el departamento de Santander.
A las 7:25 de la noche llegó al Centro de Convenciones de la Cámara de Comercio de Tunja, donde lo esperaba un nutrido auditorio al que se dirigió hasta las 7:52 minutos cuando salió para el centro empresarial Green Hills.
Durante la casi media hora en la que estuvo se refirió a la oportunidad de poder llegar a generar un cambio en el país, recalcó en su tesis de cero corrupción y que no se podía seguir con los mismos de siempre.
Dijo que la idea era poner el aparato estatal al beneficio del pueblo y no de unos cuantos, que les va a quitar las prebendas como carros, celulares y viáticos a los congresistas, que esos son gastos que no tienen por qué pagarse con el dinero de los colombianos, sino cada uno de los parlamentarios con un salario de 34 millones de pesos.
Añadió que Su prioridad serán educación y empleo, a través de los cuales no se piense solo en traer a los jóvenes a la ciudad, sino que se vea la posibilidad de que sigan en el campo.
Con respecto a su crecimiento lo atribuyó a que él representa al pueblo y que no se identifica con ninguno de los dos extremos en los que se ha polarizado la campaña presidencial como lo es la ultraizquierda de Gustavo Petro y la ultraderecha de Federico Gutiérrez.
Sobre las 8:00 arribó a Green Hills a una reunión que le organizaron diferentes líderes, entre ellos don Luis Quintana, el papá de Nairo, con unos 300 asistentes especialmente líderes campesinos de diferentes municipios y el mensaje del candidato presidencial fue directo en que iba a poyar totalmente el campo y que la salida de este país está en fortalecer la ruralidad.
Cerca de las 8:30 salió para Paipa donde en el Centro de Convenciones lo esperaba Nairo Quintana y unos empresarios, en una cena privada que se extendió hasta pasadas las 10:00 de la noche. En ese lugar se hospedó Hernández y esta mañana a las 6:30 tuvo la primera de las reuniones en las que siguió en Paipa y sobre las 10:00 de la mañana abordó el vuelo chárter en el que llegó ayer.