Con protesta frente a Corpoboyacá reclaman la apertura de Playa Blanca en Tota, esto es lo que dice el Director

Un grupo de personas con pancartas, pitos, megáfono y unas camisetas en las que se puede leer ‘Queremos trabajar’ llegó sobre las 10:00 de esta mañana frente a las instalaciones de la Corporación Autónoma Regional de Boyacá (Corpoboyacá), en Tunja para reclamar la apertura del atractivo turístico denominado Playa Blanca, que administra esta autoridad ambiental.

Un grupo de personas llegó procedente de los municipios de Tota y Aquitania, para exigirle a Corpoboyacá la reapertura inmediata de Playa Blanca. Foto: Archivo Particular

La situación se presentó justo en el mismo instante en que el director, Herman Amaya, rendía cuentas de lo hecho por la corporación ambiental más importante del departamento durante su segundo año de labores, en el 2021.

“Entiendo la complejidad y el disgusto de estas personas, las que hemos invitado a dialogar, pero se resisten y solo quieren que vayamos de inmediato a abrir Playa Blanca, cuando eso aún no lo podemos hacer, porque debemos responder a las órdenes de las diferentes entidades del gobierno nacional, si abrimos nos ganamos una sanción”, dijo a Boyacá Sie7e Días Herman Amaya, director de Corpoboyacá.

El Funcionario añadió que el complejo ya se cuenta con la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales (Ptar) construida, la batería de baños, zona de camping, cerramiento, sendero y placahuella.

Ahora lo que viene es la construcción de los kioscos, la construcción del parqueadero y del muelle que ya tiene ingeniería de detalle y estudios y diseños. Pero además se adelantará un segundo paquete de estudios y diseños para el sistema eléctrico, la caseta de bienvenida que se debe demoler y reconstruir, al igual que la portería.

“No podemos abrir porque hay que tramitar ante la Agencia Nacional de Licencias Ambientales (Anla) la licencia de aguas, ya que esa no nos la podemos otorgar nosotros mismos y la obra la iniciaron en la administración pasada sin estas licencias, pero además, la Procuraduría ordenó la demolición de los muelles, porque son construcciones ilegales, que no cumplen ni con la mínima medida de seguridad”, explicó Amaya.

El Director de Corpoboyacá añadió que ya están los estudios para la construcción de los nuevos muelles, pero que además se deberá construir una subestación eléctrica, redes hidráulicas, implementar el componente de seguridad en el trabajo, señalización informativa y preventiva.

“Esto es una falta de respeto, es un abuso, ya vamos para tres años con este atractivo natural cerrado y Corpoboyacá se hace el de las gafas ante nuestro reclamo, las obras avanzan muy despacio y no vemos la verdad que el señor director esté interesado en agilizar estas obras, que además pueden seguir construyendo, mientras permiten el acceso y dinamizan la economía de quienes dependemos de este lugar”, dijo Carlos Cardozo, uno de los comerciantes de la zona.

Playa Blanca está cerrada desde 2020 por pandemia y ahí empalmó con los trabajos de obras civiles y la idea es que se alcance a reabrir pasada la mitad de año, pero eso también dependerá de la Anla, según informó el líder de la Corporación Autónoma Regional de Boyacá.

“Estamos haciendo unos esfuerzos muy grandes, serán más de 5.000 millones de pesos lo que se termine invirtiendo en este atractivo turístico, para brindar verdaderas condiciones tanto a visitantes, como a los trabajadores, comerciantes y hoteleros de la zona. Se darán cuenta que cuando reabramos, habrá valido la pena la espera”, recalcó Herman Amaya.