¿Quiénes eran el hombre asesinado y el que lucha por su vida en una UCI tras el atraco a cuchillo en Duitama? Les contamos

Martín Oliverio Cerón Reyes, salió de su casa en el barrio María Auxiliadora, para ir a tres cuadras de allí a donde uno de sus cuatro hijos, a celebrarle el cumpleaños a su nieto mayor, pero había caminado apenas un poco más de cien pasos cuando se encontró de frente con los delincuentes, que por oponer resistencia a ser robado le propinaron una puñalada en el pecho que le causó la muerte de manerainstantánea.

Martín Oliverio Cerón Reyes (izquierda), falleció por herida en el pecho y Norberto Guío (derecha), lucha por su vida en una UCI del Hospital de Duitama. Fotos: Archivo particular.

El hecho quedó registrado en una cámara de vigilancia del sector que muestra las 4:44 de la tarde cuando fueron interceptados por los delincuentes y su ingreso al Hospital de Duitama quedó registrado a las 5:41 de la tarde sin signos vitales, con una herida precordial de 8 centímetros, es decir en la zona cardiaca. 

Tenía 63 años, era mecánico de vehículos de tipo pesado, casado y padre de cuatro hijos. Había nacido en Duitama, era el quinto de los nueve hijos del segundo matrimonio de Urbana Reyes Becerra con José Oliverio Cerón.

Martín Oliverio compartió su infancia, adolescencia y gran parte de su vida con sus hermanos: Armando, Jaime (q.e.p.d.), Cecilia, Gustavo, Carmenza, Gladys, Oscar, Luz Marlén, Alberto y Claudia Patricia. Conformó su hogar con María Elena Nieto, con quien tuvieron cuatro hijos: Heber Aníbal, Carolina, Jeferson Martín y María Alejandra, todos adultos ya.

Un apasionado por el fútbol, ese era su vicio, gusto que compartía con Norberto Guío, su incondicional amigo a quien le dicen Calimán. Pero no solo los unía el fútbol, los dos de la misma edad: 63 años, y el trabajo, ambos reconocidos mecánicos en la ciudad.

Se habían encontrado minutos antes y caminaban por el andén, cuando fueron atracados y gravemente heridos. Calimán no podrá acompañar a su amigo esta tarde a las 3:00 a darle el último adiós, precisamente porque desde la tarde del domingo se encuentra luchando por su vida en una UCI luego de ser sometido a varias cirugías tras las heridas de abdomen y de tórax, que le propinaron el par de jóvenes delincuentes que los atracaron y de los cuales uno, el menor de edad ya fue capturado.

Norberto Guío es mecánico independiente y presta sus servicios en diferentes talleres; tiene a su cargo a la mamá, de 84 años de edad con quien viven junto a una hermana en una humilde vivienda en el barrio Tadeo Prieto, cerca del colegio La Presentación de Duitama. 

Su pronóstico es reservado, precisamente por la gravedad de las heridas que recibió luego de tratar de defenderse propinándole un puño en la cara a uno de los hampones que los interceptaron para quitarles sus pertenencias el pasado domingo en el barrio María Auxiliadora, en inmediaciones de la plaza de mercado de la llamada Ciudad Cívica de Boyacá.