El preso atacó a la mujer después de que un perro que ella controlaba le detectó marihuana en su poder.
Un recluso de la cárcel de Sogamoso intentó asesinar a una guardiana, después de que la funcionaria del Inpec realizara un registro al preso con un perro antinarcóticos y este detectara que el interno llevaba marihuana entre su ropa interior.
El hecho ocurrió el lunes, antes de que el recluso recibiera su visita conyugal. Tras detectar que el preso tenía narcóticos en su poder, se le informó que quedaba sancionado y no se le permitiría la visita íntima.
El preso, entonces, corrió hacia el patio al que pertenece y allí le pasaron un chuzo. Con el arma en la mano atacó en el pecho a un guardián y luego se abalanzó sobre la guardiana, contra quien arremetió con furia, según los relatos entregados a Boyacá Sie7e Días.
El interno le propinó seis puñaladas a la guardiana en las piernas, los brazos y las manos. La mujer se defendió como pudo, cubriéndose el cuerpo con los brazos y las manos para evitar heridas en su cabeza, cuello o tórax.
De acuerdo con las versiones conocidas, mientras la atacaba el recluso gritaba que la iba a degollar, que la quería matar.
Cuando por fin la guardia pudo reducir al interno y quitarle de su alcance a la funcionaria del Inpec, la mujer pudo sentirse a salvo y pensar en sus pequeños hijos.
Aunque la guardiana supo defenderse, sufrió una herida delicada en uno de sus codos y tuvo que ser intervenida quirúrgicamente en el Hospital Regional de Sogamoso.
A la funcionaria del Inpec, madre de dos hijos, le dieron 20 días de incapacidad.
Según pudo establecer Boyacá Sie7e Días, tras el ataque la mujer no ha recibido visitas por parte de funcionarios de ninguna entidad para conocer su estado de salud u ofrecerle acompañamiento para superar este episodio.