Felicidad – Cecilia Jiménez de Suárez – #DomingosDeCuentoYPoesía

Pedro era un empleado del Banco Municipal vivía con su esposa y dos hijos, pero tenía la costumbre de discutir a toda hora  por cualquier motivo, inconforme a pesar de todos los bienes que poseía: casa, finca, automóvil y muchos objetos lujosos.

Cuando sobrevino el problema más grande para todo el mundo, la terrible pandemia CORONAVIRUS y en consecuencia el aislamiento obligatorio en las casas, Pedro, quien estaba acostumbrado a paseos y reuniones fuera de la casa, con los amigos, al verse obligado al aislamiento, se puso furioso y cada vez más agresivo.

Dieguito, el hijo mayor, en uno de sus pasatiempos, había acumulado una serie de dibujos, que en los trasteos se habían refundido y él los quería ver para distraerse, pero no recordaba en qué caja estaban. Pasaban los días y los niños cohibidos por el mal genio del padre y la súper protección de la mamá, se la pasaban durmiendo o con el computador, el celular o la TV,  no querían  ayudar a nada, ni siquiera jugaban.

Tinín, el perrito de Camilo, el hijo menor, un día jugando, agarró el nudo de una pita que amarraba una caja de cartón que, precisamente era la que contenía los dibujos de  Diego, caja que había quedado en el cuarto de san Alejo, pero estaba debajo de unos muebles muy pesados. 

Camilo, el otro niño le dijo a su papá que por qué no miraban a ver qué era lo que había en esa caja, a lo cual él, que estaba mirando una película, le gritó: ¡No me molestes! qué va a haber en esos trastos, vete a dormir,  Camilo! Mientras tanto Rosita, lla mamá estaba muy entretenida, experimentando  la preparación de una torta especial, cuya receta había encontrado en una revista. Pedro,  una vez  terminó la película, se acordó del pedido de Camilo y, por curiosidad, se fue a ver qué era lo que había en la caja.

La sacó y viendo que eran los dibujos de Diego, no les prestó atención. Dijo: ¡Ah, qué tontería! yo pensé que eran mis  crucigramas! Y se fue a mirar televisión. Los chicos se pusieron a mirar los dibujos y al final los volvieron a guardar. Pasaron varios días y una mañana cuando Rosita le pidió a Pedro dinero para comprar el mercado, él se dio cuenta de que no tenía ni un peso, pues había gastado todo en productos caros, enlatados y comida chatarra, y  se puso furioso.

Hubo gritos y lágrimas, -el acostumbrado drama familiar.- Al fin todo se calmó y Rosita preparó un desayuno sencillo con chocolate y pan que afortunadamente había guardado, luego se acordó de la deliciosa torta, la sirvió y esto apaciguó los ánimos.

— Ella pensó: ¡Que dicha, nunca creí que mi experimento nos traería tanta felicidad!–Luego de un rato de silencio, Diego sacó de la caja sus dibujos y  se dio cuenta de que eran la serie de caricaturas que el profesor de Pintura Carlos Buitrago le había dirigido y habían ganado un un concurso importante, a lo cual nadie de la familia le había puesto atención.

De eso ya hacía dos años. En ese preciso momento dijeron  por la radio que estaban recuperando los trabajos premiados que había dirigido el maestro Carlos Buitrago, especialmente las caricaturas, por las cuales ofrecían una considerable cantidad de dinero.


Biografía:

ADEIZAGÁ, Cecilia Jiménez de Suárez,  Licenciada en Idiomas de la Universidad Pedagógica y Tecnológica de Colombia, Bibliotecaria del Ministerio de Educación. Escritora, cuentista, folclorista, poeta lírica, infantil y costumbrista. Artista plástica en  Arte  Objeto, Chatarrismo, Declamadora y Cantautora.. Miembro de: Academia Boyacense de la Lengua, Sociedad Bolivariana de Boyacá, Asociación de Escritores, cofundadora de la Academia Boyacense de la Lengua, de AESBO y  del Grupo Mujer, Palabra y Poesía. Ganadora de  Premios nacionales: Himnos de la Universidad Pedagógica y Tecnológica de Colombia, autora de los Himnos de AESBO  y varios Municipios del departamento.


Los escritores interesados en participar en este espacio dominical, deben enviar sus trabajos a nombre del escritor, Fabio José Saavedra Corredor, al correo: cuentopoesiaboyaca@gmail.com. La extensión del trabajo no debe exceder una cuartilla en fuente Arial 12. El tema es libre y se debe incluir adicionalmente una biografía básica (un párrafo) del autor.

Los criterios de selección estarán basados en la creatividad e innovación temática, el valor literario, redacción y manejo del lenguaje y aporte de este a la cultural regional.

Todos los domingos serán de Cuento y poesía, porque siempre hay algo que contar.