Mónica Osorio Vásquez es una joven talentosa que cosechó su experticia para la interpretación del canto y la guitarra en la otrora Escuela de Formación Artística de Paipa, y que muy pronto salto al mundo del espectáculo como integrante del Dueto Hoja de Roble.
Mónica se graduó como profesional en el área de las comunicaciones y ha seguido alternando su carrera con la música que ha sido para ella más que un pasatiempo, la compañera inseparable de su vida.
Esta artista natal de Paipa y residente en la capital de la república, conformó un hogar estable del que hay un bello retoño llamado Jacobo de escasos 12 meses, convertido para Mónica en la razón de todas sus luchas.
Pues bien, Mónica acaba de publicar en sus redes un mensaje que tiene conmovido al mundo de la música vernácula y en especial a los amigos de su círculo más cercano que han sido testigos de su crecimiento profesional, artístico y humano.
“Soy Mónica Osorio, tengo 27 años, mamá de Jacobo, cantante de profesión y estoy a punto de perder mi voz por lo que necesito de tu ayuda para lograr mantener mi sistema fonador en funcionamiento, si lo pierdo, no sé qué será de mí.
Canto desde los 10 años de edad. He ganado festivales, he conquistado varios países con mi música, y hasta fui nominada al “Gran Premio Mono Núñez”, el festival de música folclorica más importantes de Colombia. De igual modo he sido profesora de música y directora de coros religiosos y escolares. Mi voz es mi vida, mi herramienta de trabajo y la música es de las cosas más relevantespara mí.
El año pasado fuí diagnosticada con un nódulo maligno en la tiroides, por lo cual deben realizarme una tiroidectomía total y me tienen que retirar completamente la tiroides.
Hice los trámites por la EPS en mi país, en la que la atención no es la mejor y las citas son muy demoradas, y el cirujano que finalmente me atendió, me dijo que la posibilidad de que no volviera a cantar era del 90%, dado que al sacar la tiroides se iba a perjudicar el nervio laríngeo recurrente (nervio que controla el movimiento de las cuerdas vocales), por lo que quedaría con una ronquera que no me permitiría volver a cantar. En pocas palabras concluyó: mejor búsquese otra profesión.
Pese a tan desalentador diagnóstico seguí adelante con el proceso, radiqué papeles y me dijeron que entraba en una lista de espera que puede tardar de 2 a 4 meses. Sentí que mi vida se me acababa de a pocos, fue una noticia demasiado dura; sin embargo, decidí consultar con un cirujano particular, quien me dio probabilidades.
Dice este cirujano que la posibilidad de perjudicar mi nervio y mi voz es de apenas el 2 % lo cual me da un 98% de posibilidades de seguir cantando. La atención con este médico fue muy buena, y sobre todo la oportunidad de continuar con mi carrera artística, es la mejor noticia que he recibido en estos últimos meses de tormenta.
Por tratarse de una cirugía particular, ésta tiene un costo de $12.000.000 de pesos (3.000 USD), por lo que recurro a ustedes ya que quiero seguir cantando y sueño con aportarle al mundo un granito de esperanza más a través de mi voz y mis canciones.
Si alguien en Colombia quiere apoyarme lo puede hacer a través de Nequi o Daviplata al número 3123252552. !GRACIAS, GRACIAS!»…
Este es en términos generales el texto de la publicación que ha hecho Mónica en sus redes sociales en procura de recibir el apoyo y la solidaridad de las personas de buen corazón que quieran sumarse a la noble causa, lo que posibilitará continuar disfrutando de esta bella cadencia, así como de sus versos y ponderado registro.