
A las 4:00 p.m. en punto de ayer llegó el mandatario de los sogamoseños, Rigoberto Alfonso Pérez, al Concejo de la ciudad a cumplir con la invitación que le hizo el concejal Carlos Andrés Bello Páez, de la oposición.
El cabildante que realizó la citación, llevó a cabo una disertación que duró cerca de hora y media, y por presión de la concejala Stella Fernández terminó su exposición y dio paso a la rendición de cuentas del alcalde.
Fueron dos horas de intervención en las que habló de todos los temas, apoyado con videos. Una vez terminó, agradeció amablemente al auditorio, se despidió, se levantó y se fue.
Entonces se armó la de Troya, porque algunos concejales le querían hacer preguntas al mandatario, pero también otros cabildantes empezaron a irse, no se sabe si para la casa o a comer con el alcalde.