Consternación en Sotaquirá por la muerte de la empresaria ganadera Ligia Castelblanco Sánchez

Como una pérdida irreparable califican las habitantes de Sotaquirá el deceso de la empresaria ganadera Ligia Castelblanco Sánchez de Martínez, reconocida en su comarca como una gran mujer, líder, trabajadora, benefactora, emprendedora y defensora de las causas sociales que involucraban a su comunidad.

Ligia Casteblanco Sánchez. Fotografía Archivo particular.

La empresaria empezó a sentir los síntomas por el contagio con el COVID -19 y de manera acelerada su vida se fue desvaneciendo hasta ocasionar su muerte.

Ligia Castelblanco Sánchez era la menor de siete hermanos: Flavio, Bayardo, Berenice, Elizabeth, Omaira y Nubia que hoy lloran su partida y buscan la manera de enaltecer su nombre dando continuidad a las obras que en vida adelantó su hermana tras esa vocación de servicio que mostraba siempre y más tratándose de su pueblo Sotaquirá, asegura la empresaria del turismo Martha Mariño. una de sus más entrañables amigas.

Agregó: «En sus años de juventud, Ligia fue admiradora del diseño de modas, por eso trabajó durante varios años en una importante empresa nacional y fue entonces cuando conoció a Jorge Martínez un chiquinquireño que enamoró su corazón y la llevó al altar en un idilio que permaneció por más de 50 años».

Ligia deja tres hijos a quienes encomendó seguir el legado aprendido de su padre y abuelo don Gabriel Castelblanco que le enseño a querer la tierra y a lidiar el campo especialmente en el área de la ganadería.

 «La patroncita» como cariñosamente le llamaban en el pueblo, se destacó también por su abnegado trabajo con los niños de Sotaquirá, organizando por muchos años junto con la familia, el día de la alegría navideña cuando preparaba con devoción los detalles para los hijos de los empleados y posteriormente para los niños menos favorecidos del sector rural de su pueblo.

Otra matrona que emprende la marcha en medio de una pandemia implacable que se ha llevado a importantes líderes como doña Ligia, para quien solo hay gratitud, admiración y cariño.