Recursos Naturales con Etiqueta Climática (RNEC) – Juan Daniel Angulo Argote – #Columnista7días

Si lo que anhelamos es generar riqueza sustentable, que tenga el componente social, ambiental y económico, cada recurso colombiano necesita llevar la etiqueta climática que lo diferencie.

«Queremos dar a los consumidores los medios para evaluar en los supermercados el impacto ambiental de los productos», ha dicho el Ministro Danés de Medio Ambiente, Lars Christian Lilleholt*.

Dinamarca, uno de los cinco países nórdicos, discute el etiquetado de alimentos para el impacto ambiental. Las propuestas se iniciaron a debatir recientemente para obligar a los fabricantes de alimentos y supermercados a poner etiquetas en sus productos que calificarían su impacto en el medio ambiente y el clima. La iniciativa tiene el apoyo del Consejo Danés de Agricultura y Alimentación, donde su principal objetivo es el de promover las mejores prácticas cuando se trata de mitigar los efectos de la agricultura en el cambio climático.

La etiqueta climática se refiere a la trazabilidad que debe cumplir el producto final que produce una empresa, por ejemplo, un saco de café, una tonelada de carbón, una libra de níquel, una onza de oro, entre otros.

Por otra parte, grandes empresas mineras en el mundo vienen aplicando ese tipo de estrategia. Chile, con su empresa estatal Codelco (la mayor productora de cobre del mundo), propuso en la reunión de Asia Copper Week 2017 en China, que el cobre que se produce en todo el mundo lleve la etiqueta climática ‘cobre verde’, e invita a las empresas productoras a descomoditizar el metal rojo. El plan de Codelco es vender sus cátodos y concentrados de cobre con un precio que toma en cuenta este concepto. En el 2019 Gabriela Mistral, una de sus operaciones, produce los primeros cátodos de cobre 100% verdes. Finalmente, el mensaje de Codelco es ofrecer un producto diferenciador del resto, un proceso responsable, sustentable y trazable.

Colombia necesita direccionar la brújula de sus recursos naturales, para definir un plan de trabajo proyectado al 2030, y dentro de ese gran paquete, el Gobierno nacional, al mando de sus instituciones, debe recorrer el país y el mundo con el nuevo eslogan ‘Recursos Naturales con Etiqueta Climática (RNEC)’.

Se proponen 8 ítems de trazabilidad, los cuales se deben incorporar en el producto final que se obtiene en el proceso. A continuación se mencionan: huella de carbono, huella del agua, respeto por los DD. HH., impacto comunitario, seguridad y salud ocupacional (permite mejorar y reducir accidentes-fatalidades), igualdad de oportunidades e inclusión, transparencia y ética e impacto territorial.

El principio fundamental de la etiqueta climática es compensar el esfuerzo y compromiso adquirido por parte de los productores de los 8 ítems de trazabilidad en su producto final ‘commodities’ (materias primas o bienes transables en el mercado de valores), donde los clientes pagarían precios diferentes de acuerdo a su etiqueta climática. Se trata de un producto estandarizado, distinto del resto.

Es el momento de no seguir aplicando ese concepto obsoleto de los 80’, Responsabilidad Social Empresarial, y desde hoy hablar de ‘Recursos Naturales con Etiqueta Climática (RNEC)’.

*Tomado y modificado del Blog El Espectador “Minería con Etiqueta Climática”. Juan Daniel Angulo Argote