Los historiadores se pronuncian ante la destrucción de emblemáticos monumentos

Las directivas e integrantes de la Academia Boyacense de Historia, en asocio con las demás academias del departamento y el país, han hecho llegar un pronunciamiento a este medio para manifestar su inconformismo y rechazo a los actos vandálicos que han dejado como resultado la destrucción del patrimonio material de gran parte del país.

Javier Ocampo López – presidente de la Academia Boyacense de Historia. Fotografía – Archivo particular.

Por respeto a la Institución, nos permitimos difundir en su totalidad el texto de la misiva redactada por la Academia Boyacense de Historia.

Mayo 5 – 2021  

La Academia Boyacense de Historia, sus Directivos y demás integrantes, presentan un saludo fraternal a todos los colombianos. Teniendo en cuenta los infaustos acontecimientos que vive en este momento nuestro país, y unidos en solidaridad con la Academia Nariñense de Historia, la Academia de Historia del Valle del Cauca y demás Academias del país, manifestamos ante el Gobierno Nacional y la opinión pública, nuestra profunda inconformidad por los hechos tristes y nefastos que se han desencadenado en este Paro Nacional.  

Respetamos la creencia individual y manifestación pública de cada uno de nuestros compatriotas, quienes, a través de las protestas pacíficas, avaladas por la Ley, manifiestan su inconformismo por la problemática nacional, pero estamos en absoluto desacuerdo con la violencia inaudita que se ha desatado, causando a la fecha la pérdida de 30 vidas humanas y de innumerables bienes estatales y privados, con la carencia de alimentos y de trabajo, entre las personas más necesitadas.  

Es muy importante continuar con la programación de la vacuna COVID -19, la cual se ha visto afectada por no llegar con prontitud a su destino, con los protocolos debidos que se han visto afectados por este paro nacional. Lamentamos especialmente el atentado contra los Monumentos de Don Antonio Nariño, “El Precursor de la Independencia” en la ciudad de Pasto, y del Conquistador Sebastián de Benalcázar en la ciudad de Cali, por considerar que es un delito contra el patrimonio nacional, ilógicos sucesos de los cuales no compartimos la mayoría de los colombianos.  

Esto es una agresión a los bienes culturales de la humanidad y deshonran a nuestra historia y nacionalidad. Reiteramos la necesaria solicitud al Ministerio de Educación Nacional, para poner en marcha la reglamentación de la Ley 1874 de 2017, en forma urgente, por la cual se ordenó el restablecimiento de la enseñanza de la historia en los planteles escolares del país, que tanta falta hace para la educación de los colombianos.  

JAVIER OCAMPO LÓPEZ 
Presidente Academia Boyacense de Historia