A la cárcel presuntos secuestradores de teniente coronel de Tunja, que continúa desaparecido

Un juez con funciones de control de garantías les impuso medida de aseguramiento en la cárcel La Picota de Bogotá a siete personas, señaladas de pertenecer a las disidencias del Frente Décimo de las Farc, que tiene influencia en el departamento de Arauca.

Estos son los siete señalados de pertenecer a las disidencias del Frente Décimo de las Farc y de haber participado en el secuestro del oficial tunjano. Foto suministrada/archivo particular

Cinco hombres y dos mujeres que habrían participado en el secuestro del teniente coronel Pedro Enrique Pérez Arciniegas, comandante del Batallón Especial, Energético y Vial No.18, fueron enviados a la cárcel.

Estas siete personas están señaladas de pertenecer a las disidencias del Frente Décimo de las Farc, que tiene influencia en el departamento de Arauca, donde fue secuestrado el oficial del Ejército, quien es natural de la ciudad de Tunja.

“En audiencias concentradas, el fiscal a cargo de la investigación expuso suficiente material probatorio, como conversaciones interceptadas de los presuntos implicados, que permiten inferir su participación en el secuestro del teniente coronel Pedro Enrique Pérez Arciniegas, ocurrido el pasado 17 de abril en Saravena (Arauca)”, informó la Fiscalía General de la Nación.

Por medio del análisis del lenguaje cifrado, usado en las comunicaciones, se evidenció que también estarían implicados en el atentado contra un patrullero de la Policía el 28 de noviembre del 2020, en el hurto de un vehículo adscrito a la Registraduría Nacional el 14 de enero último, en el hurto de otro vehículo, en un doble homicidio cometido en zona rural de Saravena el pasado 15 de abril y en extorsiones a ganaderos y comerciantes.

Por estos hechos la Fiscalía les imputó cargos, según su grado de responsabilidad y participación, por los delitos de concierto para delinquir agravado, secuestro simple agravado, tentativa de homicidio agravado, hurto calificado y agravado, y porte ilegal de armas de fuego.

Los cobijados con medida de aseguramiento en la cárcel La Picota de Bogotá son:

Diego León Victoria Bello, alias ‘Mono Camila’, presunto cabecilla de las milicias urbanas de esta estructura criminal y señalado articulador de actividades ilícitas en varios municipios del departamento de Arauca.

Javier Emilio Martínez Naranjo, alias ‘Javier’, quien sería el segundo al mando de las milicias en Saravena y Fortul, encargado al parecer de coordinar diferentes actividades delictivas (hurtos, extorsiones, tráfico de armas y retención de vehículos).

Karlina Glaydimar González Rodríguez, alias ‘Michel’, quien al parecer identificó al oficial y alertó sobre su presencia para materializar la retención. Fue capturada en flagrancia por porte ilegal de armas.

Alexander Solano Villamizar, alias ‘Chulo’, quien bajo la fachada de taxista supuestamente trasladó a la víctima y a los secuestradores hacia zona fronteriza con Venezuela, la noche de los hechos. Además, movilizaría a integrantes del grupo residual para evadir a las autoridades.

Mireyita Parada Ruedas, alias ‘Mireya’ o ‘Chiki’, presunta coordinadora logística del grupo residual. Al parecer, planeaba y realizaba hurtos de vehículos, así como secuestros.

Jhoman Andrés Villamizar Vargas, alias ‘Enano’, presunto miliciano con injerencia en Saravena y Fortul y quien habría ayudado a coordinar el atentado contra el patrullero. También se presume su participación en enfrentamientos contra el Ejército y el cobro de extorsiones a conductores.

Frank Arley Ortega Molina, capturado en flagrancia por porte ilegal de armas.

El oficial boyacense que estaría en poder de las disidencias

El teniente coronel Pedro Enrique Pérez Arciniegas hace parte de las Fuerzas Militares de Colombia desde 1998. Cursó sus estudios de primaria y bachillerato en el Colegio de Boyacá, en Tunja, de donde obtuvo el título de bachiller en 1977 y de inmediato se fue a hacer curso de oficial a la Escuela José María Córdova de Bogotá.

Al parecer el oficial salió la tarde noche del sábado 17 de abril de las instalaciones militares acantonadas en Saravena, vestido de civil y dejando evidencia en la minuta de guardia que salía en compañía de su conductor, quien lo trasladó hasta el hotel Sarare In, en Saravena, argumentando que tenía que hacer unas diligencias personales en el centro.

Desde ese día se encuentra desaparecido.