[Infografía] – Covid-19 en India Las gráficas de una crisis fuera de control

Nueva Delhi, 25 abr (EFE). La velocidad de propagación del coronavirus en la India, con cifras récord de casi 300.000 enfermos y más de 2.000 muertes en un día, está provocando fallas de suministros, una crisis que las autoridades intentan revertir liberando vías para aumentar la producción de medicamentos y vacunas.

De acuerdo con los datos del Ministerio de Salud indio, del total de 15,6 millones de casos de covid-19 confirmados desde el inicio de la pandemia hasta ahora, 2,1 millones de casos se encuentran activos, un número que supone grandes presiones sobre el sistema sanitario.

Solo en la última jornada, 295.041 casos fueron confirmados, lo que muestra una rápida propagación de esta segunda ola, superando con creces la primera, en septiembre pasado, cuando los casos rozaron los 200.000 en un día.

Las muertes, que han aumentado casi a la misma velocidad, dejando nuevos récord cada día, suman un total de 182.553 fallecidos, 2.023 de ellos en las últimas 24 horas.

El 76 % de los nuevos casos se concentran en diez estados del país, que incluyen el occidental estado de Maharashtra, el norteño Uttar Pradesh, y la capitalina Nueva Delhi.

Sin oxigeno

La capital nacional, con 20 millones de habitantes, es la tercera región con mayor número de casos, casi 30.000 nuevos contagios en las últimas 24 horas, multiplicando los casos a niveles históricos en unas pocas semanas.

Los hospitales de Delhi, y otras regiones del país, han comenzado a informar de una limitada disponibilidad de oxígeno para el creciente número de personas enfermas que requieren hospitalización.

«Nuevamente solicitamos al Gobierno que aumente la cuota de suministro de oxígeno de Delhi, ya que casi 18.000 pacientes están ingresados actualmente en los hospitales de la ciudad» dijo hoy en una declaración en video el secretario adjunto del gobierno de Delhi, Manish Sisodi.

Este es el segundo día consecutivo de crisis en Delhi, después de que ayer el jefe de gobierno de la capital nacional, Arvind Kejriwal, asegurará que varios hospitales disponían de solo unas pocas horas de reserva, y pidiera al gobierno un aumento en el suministro.

La principal red de hospitales privados de la ciudad, Max Hospital, alertó a través de una carta difundida por los medios sobre la escasez de oxígeno en dos de sus instalaciones dedicadas a la atención de pacientes con covid, donde al menos 250 personas reciben oxígeno suplementario.

En una alocución televisada, el primer ministro indio, Narendra Modi, aseguró ayer que las autoridades están trabajando con los gobiernos regionales y empresas privadas para mantener la distribución necesaria.

Remdevisir

Las autoridades han además flexibilizado las imposiciones sobre la industria de fármacos nacional, eliminando los gravámenes para la importación del antiviral Remdesivir, y sus componentes activos, utilizados para tratar algunos casos de coronavirus.

«Este paso aumentará aún más la disponibilidad nacional de la inyección de Remdesivir», dijo hoy en un comunicado el ministro para Productos Químicos y Fertilizantes, Sadanand Gowda.

El Remdesivir es producido en la India por siete empresas, gracias a un acuerdo con la estadounidense Gilead Sciences Inc, y tiene una capacidad instalada de alrededor de 3,8 millones de unidades por mes.

El repunte de la demanda de este medicamento, del que India es proveedor global, llevó a las autoridades a suspender el pasado día 11 su exportación para atender la necesidad doméstica, una restricción que todavía se mantiene.

Más vacunas

La esperanza del segundo país más poblado del mundo, y el segundo más afectado por la pandemia, está en la aceleración de su campaña de vacunación hasta alcanzar un nivel de inmunización que permita reducir las muertes y las hospitalizaciones.

Sin embargo, con una población de 1.350 millones de habitantes, la India aún tiene grandes retos para satisfacer su demanda interna.

Para ello, esta semana las autoridades relajaron también las normas proteccionistas sobre su industria farmacéutica para permitir la entrada de vacunas hechas fuera de la India.

El país dependía hasta ahora de los dos únicos preparados hechos en el país: Covaxin de Bharat Biotech; y Covishield, del laboratorio británico-sueco AstraZeneca producida por el Instituto Serum de la India (SII).

La flexibilización permitió la aprobación de uso en el país de la vacuna rusa Sputnik V, la primera fórmula hecha fuera de la India, que se comercializará en el país en mercado abierto, para el sector público y privado.

El SII anunció hoy también, dos días después de la apertura a nuevas vacunas, un ajuste de precio a las dosis que vende al Gobierno de la India, aumentando el costo de tres a cinco dólares por unidad a partir de ahora, así como el aumento de su producción hasta los 100 millones de dosis mensuales.

Las autoridades prevén expandir su plan de vacunación al máximo el próximo 1 de mayo, cuando podrá comenzar a vacunarse toda su población mayor de 18 años.

Indira Guerrero

EFE