El triple objetivo con el que se ha hecho frente a la pandemia en este departamento

El triple objetivo fue el máximo logro para la Secretaría de Salud del departamento de Boyacá en este primer año de pandemia.

Jairo Mauricio Santoyo Gutiérrez asegura que el departamento de Boyacá logró abanderar en diferentes momentos la lucha contra la pandemia en el país. Foto: Oficina de prensa/Secretaría de Salud de Boyacá

“El triple objetivo consistía en ampliar capacidad hospitalaria y cuadruplicamos las unidades de cuidados intensivos; contar con capacidad diagnóstica y montamos un laboratorio de biología molecular y tener la capacidad en un servicio con el que no contábamos, y tercero, lograr llegar a toda la comunidad con la educación asertiva en COVID”, explicó el secretario de salud de Boyacá, Jairo Mauricio Santoyo.

Según él, cuando la noticia invadió el mundo empezaron a prepararse para asumir la pandemia. Desde el mes de marzo, el gobernador de Boyacá, Ramiro Barragán Adame declaró la calamidad pública y la alerta amarilla ante la vulnerabilidad del sector salud y la necesidad de dotar la red hospitalaria con equipamiento médico, acorde con las necesidades que implicaba la situación.

Se vinieron entonces una serie de medidas acatando las directrices del Gobierno Nacional, entre ellas, el aislamiento obligatorio. Sin embargo, el primer caso llegó a Boyacá el 25 de marzo, 19 días después del primer caso nacional y desde ese día no se han dejado de contar casos, al igual que decesos desde el 4 de abril, cuando se registró el primer fallecimiento.

También, el Gobierno Departamental compró 11 mil pruebas rápidas para tamizar al personal de la salud, población indígena y vendedores de las plazas de mercado, las cuales se recibieron el 30 de mayo y poco a poco, fue dotando de equipos a los hospitales del departamento, logrando llegar a Puerto Boyacá, Soatá, Moniquirá, Duitama, Sogamoso y Tunja, con más de 100 ventiladores que fueron adquiridos por la Administración Departamental y las empresas Sociales del Estado, de esta manera y en muy corto tiempo logramos pasar de 66 unidades de cuidados intensivos a 239 que tenemos en la actualidad, lo cual nos ha ayudado con aquellos pacientes que requieren de atención especial.

“Así mismo, y ante la necesidad de procesar las pruebas moleculares en el Departamento, logramos el 4 de julio, que el Instituto Nacional de Salud nos avalara el Laboratorio Departamental de Salud Pública, luego el 14 de agosto el del Hospital Universitario San Rafael, y finalmente el 18 de agosto, el laboratorio Carvajal, contando de esta manera con tres laboratorios que fueron clave para fortalecer la capacidad diagnóstica”, recalcó el Secretario de Salud de Boyacá.

Gracias a la pandemia hoy hospitales como el de Chiquinquirá, Puerto Boyacá, Soatá y Moniquirá, cuentan con cuidados intensivos y en esos centros médicos no tenían ni siquiera cuidados intermedios. A estos se suma el Hospital de Duitama que no contaba con unidad de cuidados intensivos propia, sino alquilada por un particular.

Hasta ayer se habían aplicado un poco más de 38 mil vacunas y ya dieron inicio a la segunda etapa de vacunación. Foto: Oficina de prensa/Secretaría de Salud de Boyacá

“Hace un año, tener capacidad diagnóstica y hospitalaria era un reto muy grande, porque no había disponibilidad en el mundo para poder abastecer con tecnología esta necesidad en su momento”, recalcó Jairo Mauricio Santoyo.

Hoy el reto es lograr hacer una vacunación rápida y segura con las pocas dosis que están llegando al departamento, pero que irónicamente ya tiene a varios municipios en aprietos y lo que se debe es fortalecer para llegar a diciembre con un buen ritmo de aplicación de los biológicos.

“El apoyo del doctor Ramiro ha sido fundamental y el que haya depositado la confianza en nuestro manejo para enfrentar la pandemia, sin duda marca la diferencia con otros departamentos. Hay decisiones que hemos tenido que tomar y que son impopulares, pero que han sido fundamentales a la hora de enfrentar la emergencia”, aseguró Santoyo.

De igual manera, para realizar la búsqueda activa de casos en las principales ciudades del departamento, y después, atendiendo los nuevos lineamientos del Gobierno Nacional y fundamentalmente de la Estrategia Pruebas, Rastreo y Aislamiento Selectivo Sostenible, PRASS, el Gobierno Departamental adquirió un paquete de 3.500 pruebas rápidas con el sistema de antígenos, las cuales complementariamente a la tarea de los alcaldes y las EPS, pudimos aplicarlas y de manera inmediata determinar quiénes podían estar contagiados.

Adicionalmente para el personal de la salud, compraron elementos de protección personal que entregaron a todos los hospitales de Boyacá, con el fin de proteger a quienes a diario arriesgan su vida por cuidar la de los demás.

“Siempre tuvimos el apoyo del Gobierno Nacional a través del Ministerio de Salud y Protección Social, quienes abanderaron la causa y nos impulsaron a salir adelante para que hoy Boyacá se convirtiera en el segundo departamento después de Cundinamarca, en el manejo de la pandemia”, comentó el Funcionario.