William René Salamanca, el general que nunca olvidarán en la Policía

Si hay un boyacense que haya sido noticia este año, ese es el general William René Salamanca Ramírez, quien hace apenas una semana dejó la institución policial, tras contribuir para ‘tumbar’ de la dirección a su superior, el general Oscar Atehortúa.

Pero, de esta manera también terminaron 35 años de carrera para este alto oficial de la Policía oriundo del municipio de Úmbita, quien por su antigüedad, con el relevo en la dirección de la Institución, automáticamente tuvo que dejar el cargo de inspector general que ocupaba desde hace un año.

Precisamente la llegada a ese cargo, le terminaría abriendo la puerta de salida el pasado 22 de diciembre, al boyacense de 56 años de vida, tras resultar enfrascado en un fuerte pulso nada más ni nada menos que con quien le ganara el cargo como director de la Policía el 10 de diciembre de 2018, pues el general Salamanca era uno de los más opcionados para ocuparlo.

Sin embargo, la refriega que terminó en los estrados judiciales y de organismos disciplinarios entre estos dos pesos pesados se vendría a originar en el año 2019, cuando el oficial boyacense fue nombrado como inspector, es decir, la máxima autoridad disciplinaria de la entidad y entre sus nuevas labores, Salamanca recibió el expediente de las casas fiscales en San Luis (Tolima), un proceso abierto por su antecesor en este cargo, el general Jorge Luis Vargas, quien coincidencialmente acaba de ser nombrado director.

La investigación de Salamanca terminó poniendo el reflector sobre el general Oscar Atehortúa Duque, pues entre otras anomalías se investiga cómo es que de los más de 17.000 millones de pesos que costó el proyecto, cerca de 8.000 millones habrían presentado “una apropiación indebida por parte de varios señores generales”.

El rifirrafe entre los dos oficiales resultó a finales del año pasado en un fuerte episodio en el que el boyacense increpa a su director diciéndole que sabe que él lidera un complot para sacarlo de la Policía y le advierte que va a develar el entramado criminal del proceso de las casas fiscales. El general Atehortúa le recuerda a Salamanca sus malos resultados cuando fue director de Seguridad Ciudadana y decide enviarlo a vacaciones, aprovechando que llevaba 13 años sin descansar, por lo que tenía acumulados 402 días.

Como resultado de las denuncias del general Salamanca, la Procuraduría General de la Nación llamó a una audiencia de juzgamiento disciplinario al entonces director de la Policía, general Atehortúa, por presuntas irregularidades que tienen que ver con el proyecto de vivienda fiscales CENOP y porque se habría extralimitado en funciones y habría cometido tráfico de influencias mientras estuvo al frente del Fondo Rotario de la institución.

La Procuraduría seguirá en el desarrollo de la investigación, escuchando al ahora General (r) William Salamanca quien hace unos meses dijo sentirse “decepcionado” de quien fuera su superior y hasta denunció un alto peligro contra su vida y contra la seguridad de su familia, incluida su señora madre, una mujer de 81 años que se encontraba aislada en una finca de Boyacá y añadió que en su despacho se adelantaban para esa fecha cerca de 170 investigaciones relacionadas con posibles hechos de corrupción dentro de la Institución.

“Dejo constancia de que aquí no hay ningún complot contra el director general de la Policía Nacional. Dejo constancia de que aquí solamente ha habido un propósito netamente institucional de cumplir una labor ética y correcta en la lucha contra la corrupción. Dejo constancia de que aquí no hay ningún enfrentamiento contra el director general de la Policía. Soy respetuoso del director general de la Policía, no es nada personal”, aseguró a comienzos de este mes el oficial oriundo de Úmbita.

Hijo de una docente y un político, William Salamanca, siempre tuvo una destacada carrera en la Policía tras cursar su formación en la Escuela de Cadetes en Bogotá a la que ingresó en 1983 tras terminar su bachillerato en el colegio de su pueblo natal.