El compositor Carlos Martínez Vargas llegó al ‘octavo piso’

Uno de los más reconocidos compositores del departamento, nacido en Santa Rosa de Viterbo es el aplaudido Carlos Martínez Vargas, admirado por un vasto repertorio de su creación puesto al servicio de la música andina colombiana, pero también por sus pasodobles que, como el de Duitama, se han convertido en verdaderos himnos populares para las comarcas.

Carlos Martínez Vargas. Fotografía – Archivo particular

El dueto Zabala y Barrera interpretó varias de sus obras y de manera particular su pasillo Tormento, con el que hicieron poner de pie al exigente publico de Ginebra en el Festival Mono Núñez, evento del que fue su delegado para Boyacá por varios años.

Carlos Martínez Vargas es además un destacado historiador, escritor, letrista y vocalista, talento que le permitió integrar el Dueto Bolivariano con el desaparecido tenor  Jorge Hernán Flechas en cuyas voces se refugiaron, tanto sus fantásticas creaciones, como las de otros destacados compositores de la patria.

Hombre de radio que en los años 70 y 80 protagonizó importantes y trascendentales momentos en las estaciones radiales de Boyacá y el país y luego con su programa “aplausos para Colombia” promocionó los intérpretes, autores y compositores en la difusión de la música colombiana.

Ha sido corresponsal de El Espectador, promotor del periódico Criterio Boyacense, director de la Transmisora La Independencia, locutor y coordinador de programas de la Radio Nacional de Colombia y de Inravisión,

Entre sus más destacas publicaciones se encuentran: “La radio, pilar del desarrollo” “Retazos de mi vida” y “Santa Rosa de Viterbo, pilar de la grandeza nacional”.

El Dueto Bolivariano integrado por Carlos Martínez Vargas y Jorge Hernán Flechas. Fotografìa – Archivo particular

Más de 300 títulos conforman su obra compositiva que están condensadas en una edición a la que denominó “Mi música”, con prólogo del desaparecido escritor Fernando Soto Aparicio, “Que no se apague el Canto”.

Carlos Martínez Vargas hizo sus estudios primarios en el colegio Carlos Arturo Torres Peña de su ciudad natal, en tanto que el bachillerato los cursó en el colegio de Boyacá de Tunja y posteriormente se graduó como Ingeniero Agrónomo de la UPTC.

“Parodiando a San Ignacio de Loyola, afirmo que todo lo que he vivido y realizado lo he hecho, A.M.G.D. es decir:  A Mayor Gloria de Dios. Siempre y como todo ser humano, he tenido la esperanza de disfrutar de una larga vida con mis familiares y amigos. A estas alturas de la misma, soy consciente de los límites fijados por Dios y aprovechando de los recursos con que generosamente me ha dotado, es mi deseo darle gracias a Él, en primer lugar, por Su Divina Voluntad al permitirme ser un habitante más de este el mundo que Él creo y en el que vivimos millones de seres humanos”, afirmó el cantautor en un sentido escrito que hizo llegar a sus más selectos amigos.

Feliz cumpleaños para este baluarte de la cultura y que su llegada al “octavo piso” sea la consolidación de atesorados sueños para bien de las letras, el arte y su querida familia.