Mitos y leyendas del occidente boyacense

En la zona esmeraldífera del occidente de Boyacá abundan los mitos y las leyendas pero, tal vez, los más importantes son los  de Fura y Tena, El Pollo Mágico y el Árbol de Don Pedro Hernández.

Fura y Tena. Foto: Archivo Boyacá Sie7e Días

Fura y Tena fueron los dos primeros seres de la creación. El Creador, el dios Are, les dio eterna juventud y eterna belleza. Pero si había infidelidad de parte de alguno de ellos, envejecerían y morirían. A la región llegó un mancebo llamado Sarvic, con quien Fura tuvo una aventura. Cuando Tena se dio cuenta de la infidelidad comenzó a envejecer, se suicidó.  En castigo por su desobediencia, Are los convirtió en dos rocas, que están una a cada lado del río Minero sobre la vía que de Borbur conduce a Otanche.

El Pollo Mágico

Pollito. Foto: 123RF

Nadie sabe dónde surgió ni con qué fin. Es un pollo que en las noches avisa a los viajeros que hay un peligro, ya sea un accidente, o que el viajero va a ser asesinado.

El Árbol de Don Pedro Hernández

Raúl Ospina. Foto: archivo Boyacá Siete Días.

Es un árbol que existe en los bosques del occidente de Boyacá. Mide entre cuatro y cinco metros y si alguien pasa y no lo saluda, porque no sabe o por omisión o porque no cree en el mito, la piel se le brota, siente mareas y muchas complicaciones.

Por: Raúl Ospina Ospina