Negoció un automóvil que le habían dado a guardar. La víctima le entregó 13 millones de pesos como parte de pago por el automotor. La Fiscalía logró probar el delito cometido por el hoy condenado.

Gabriel Andrés Andrade fue condenado a seis años de prisión por el delito de estafa agravada, al vender un vehículo que le habían dado a guardar.
El Juzgado Cuarto Penal de Conocimiento de Tunja, con el material probatorio expuesto por un fiscal de la Seccional Boyacá, también sentenció a Andrade a pagar una multa de 72 salarios mínimos legales vigentes.
“En el 2014 la víctima de la estafa entregó al hoy sentenciado 13
millones de pesos, como parte de pago por la compra de un vehículo. Andrade, por su parte, entregó un contrato de compraventa en blanco, un formulario de solicitud de trámite del
Registro Nacional Automotor (RNA) del Ministerio de Transporte y una autorización de tenencia del
vehículo firmado por otra persona que, según la explicación del procesado, era la anterior dueña del automotor. Es decir, se trataría de un traspaso abierto de dicho bien”, explicó la Fiscalía.
Cuando la víctima quiso registrar la compraventa del vehículo ante las autoridades de tránsito, le informaron que el automotor se encontraba en prenda con una entidad financiera y que, adicionalmente, estaba vinculado a un proceso judicial.
Ante esta situación, el comprador se comunicó con la dueña real del automóvil, quien le manifestó
que no había dado autorización para la venta, y que Andrade solo era la persona a quien le había dado a guardar su vehículo. Esto motivó a la víctima a interponer la denuncia por la presunta estafa.
El juez Cuarto Penal de Conocimiento de Tunja le concedió a Gabriel Andrés Andrade el beneficio de prisión domicilia.