“Miguel Parra es un minero 5, que desde muy niño se fue a trabajar en la mina de su señora madre y hoy es el presidente de la empresa de carbón coquizable Milpa, que es el mineral que encontramos en el interior del país y que es absolutamente indispensable para producir acero y para la construcción”, dijo la mañana de este jueves, Diego Mesa, el Ministro de Minas, durante el evento de celebración del Día del Minero.
A la transmisión fue invitado por Boyacá el presidente de Milpa S.A. para contar su historia, como modelo de desarrollo. “La historia de Miguel Parra, es un ejemplo de tenacidad, de emprendimiento, de responsabilidad y de cómo nuestros mineros legales son los artífices del desarrollo de nuestro país”, dijo el Ministro.
De esta manera este empresario boyacense se convirtió en el único empresario de la minería en el departamento de Boyacá en ser homenajeado y tomado como referencia por parte del Ministerio de Minas en el Día del minero.
“Me encontraba cursando mis primeros años de escuela allí en Samacá, y para mí era muy difícil aprenderme las tablas de multiplicar, por lo que a mitad de año tomé la decisión de retirarme de la escuela e irme a una mina pequeñita de propiedad de mi madre que comenzaba a producir carbón”, recuerda don Miguel.
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Dijo que comenzó ganándose un peso diario de salario, manejando una carretilla que se enterraba en el lodo y que ahí comenzó hasta que más tarde se convirtió en el gerente de la Asociación Cooperativa de Carbón, y ahí comenzó todo.
“Nos dimos cuenta, con el nacimiento de Acerías Paz del Río, que nuestro carbón también servía para producir acero y que había allí un potencial muy grande no solo de producción, sino de calidad y ahí inició la industria de coquización vendiéndole nuestro producto a esa siderúrgica”, explicó.
Hoy Milpa S.A. cuenta con frentes de trabajo en Samacá y en Socha (Boyacá), al igual que en Guachetá (Cundinamarca). “Si hay algo fundamental para nosotros es el poder convivir ayudando a las comunidades y siempre hemos estado prestos a ver cómo podemos auxiliar a nuestros coterráneos para que haya una armonía y una fuente de empleo”, cuenta Parra.
Narra el empresario, que le vienen a la memoria las dificultades de aquella época, hace 37 años, cuando después de muchos esfuerzos realizados con Angelita Castiblanco, su esposa (qepd), decidieron organizar lo que hasta ese momento era ‘Miguel Parra’ para darle forma, hoy, a Milpa, empresa familiar y de capital cien por ciento colombiano.
Don Miguel, un hombre de fe, agradece la generosidad de Dios con él al haberle premiado, inicialmente con sus cuatro hijos mayores, que hoy son a su lado la columna vertebral de la compañía, y luego, con su segunda esposa su última hija.
“Sin el apoyo de todos ellos no hubiésemos podido alcanzar lo que hasta ahora hemos logrado; tampoco hubiese sido posible sin la colaboración de todos nuestros compañeros, de tantos empleados y trabajadores que han pasado por nuestras empresas durante estos años y de la colaboración de todos los que han participado en la cadena productiva como son nuestros proveedores, nuestros compradores, comunidades de las regiones donde hemos trabajado, de los bancos, de los transportadores, de las autoridades de todos los niveles, de los puertos, talleres, y prestadores de muchos otros servicios indispensables”, recalcó el empresario de Samacá.
Aprovechando esta fecha especial, el 16 de julio, en el que se conmemora el Día del Minero, el líder empresarial invita “a seguir adelante con la fe en Dios y en la Virgencita del Carmen, con la fe del carbonero, para que de esta forma sigamos respondiendo por nuestras familias, las economías de nuestros pueblos y para aportar un granito de arena al desarrollo de nuestro país, porque no debemos perder el posicionamiento que le hemos dado a Colombia en el exterior y a nuestro coque como uno de los mejores del mundo en el mercado internacional”.