‘Tunja ya tiene un Plan de Desarrollo que proyecta a la capital a 2030’: asesor de Planeación #LaEntrevista

Ronald Zamir Cadena Ávila, asesor de Planeación de la capital boyacense, explica uno a uno los principales detalles del Plan de Desarrollo que acaba de ser aprobado por el Concejo municipal.

Zamir Cadena, el asesor de Planeación de Tunja, se refirió a los principales detalles de cómo se construyó, se aprobó y se aplicará el Plan de Desarrollo. Foto: Archivo Boyacá Sie7e Días
Zamir Cadena, el asesor de Planeación de Tunja, se refirió a los principales detalles de cómo se construyó, se aprobó y se aplicará el Plan de Desarrollo. Foto: Archivo Boyacá Sie7e Días

Varias de las inquietudes que tienen en los barrios, los transportadores, los empresarios, la industria, el área rural, en el sector educativo y de salud, serán despejadas a continuación.

¿Qué tan participativo fue el Plan de Desarrollo de Tunja?

El Plan de Desarrollo ‘Tunja, la capital que nos une’, para el periodo 2020-2023, se adelantó con una metodología participativa llamada BIT PASE (Balance de Interacciones y Tensiones entre la Población, su base Ambiental y su dinámica Socio Económica), en donde se evidencian las problemáticas junto con la sociedad a través de espacios participativos, con el fin de identificar la solución real a los requerimientos de los tunjanos. A partir de esto, y teniendo como base el Programa de Gobierno, se desarrollaron los componentes de diagnóstico, participativo, estratégico y financiero del plan.

¿Cuánto tiempo tardó el proceso?

La construcción de nuestro Plan de Desarrollo inició en el mes de enero con la conformación del equipo de trabajo, la recolección de información y elaboración del diagnóstico, donde nos reunimos los secretarios, asesores, gerentes y directores junto con el alcalde, Alejandro Fúneme, verificando la información entregada en el proceso de empalme y definiendo la metodología de construcción del plan. A partir de estas decisiones se puso en marcha la ruta de trabajo definida para elaborar este instrumento tan importante para la ciudad.

Desde los diferentes sectores urbanos y rurales de la capital boyacenses salió gran parte de las diferentes iniciativas y propuestas que fueron incluidas en el Plan de Desarrollo del alcalde Alejandro Fúneme. Foto: Archivo Particular

¿Qué siguió en ese proceso?

Durante el mes de febrero realizamos los talleres participativos con la comunidad y se elaboró el documento preliminar del plan con la estructura propositiva, la cual contenía pilares, líneas temáticas, programas, estrategias e indicadores.

¿Cuál fue el cronograma para su aprobación?

El documento fue radicado al Consejo Territorial de Planeación (CTP) y a Corpoboyacá el día 29 de febrero de 2020 para su correspondiente concepto, según lo dicta la normativa.

Durante el mes de marzo y abril se continuó con la construcción del plan, no solo teniendo en cuenta los valiosos aportes del CTP y la corporación ambiental, sino el de diferentes entidades del orden nacional y los correspondientes entes de control, todo enmarcado por supuesto en la nueva realidad referente a la emergencia sanitaria causada por el COVID-19, lo cual nos hizo replantear programas, estrategias e indicadores para que concordaran con las nuevas circunstancias desde el punto de vista estratégico y presupuestal.

¿Y en el Concejo municipal?

El 30 de abril, en cumplimiento de la ley, radicamos el Plan de Desarrollo al Concejo municipal. Durante el mes de mayo se realizaron las sesiones y debates para la aprobación. Durante este periodo se realizaron 14 sesiones y 2 debates, en donde se expusieron cada uno de los pilares que componen el Plan de Desarrollo y el Plan Plurianual de Inversiones.

 ¿Qué tanto aporte hubo de los concejales?

La discusión en el Concejo fue muy constructiva y propositiva: se escucharon y apropiaron sugerencias y aportes de los concejales, los entes de control, el CTP, entidades nacionales y la comunidad, siendo aprobado el Plan de Desarrollo ‘Tunja, la capital que nos une 2020-2023’ el día 29 de mayo del 2020 en plenaria del Concejo municipal.

¿Y la concertación con la comunidad?

Se realizó a través de 16 talleres participativos, 12 talleres urbanos y rurales y 4 talleres temáticos. Más de 1.966 personas participaron en 11 mesas de concertación y contamos con más de 5.000 cartas de niños y jóvenes que fortalecieron la construcción del documento. 

¿Y en medio de la pandemia?

No, estos encuentros fueron previos al aislamiento preventivo obligatorio, ya que fuimos muy rigurosos con los tiempos, a su vez, se abrieron espacios virtuales con las opiniones y comentarios realizados por los tunjanos en las instancias de comunicación de la Alcaldía y del Concejo municipal a través de los Facebook Live y páginas web oficiales, en las que se evidenciaron necesidades en marco de la emergencia sanitaria que fueron insumos valiosos para la construcción del Plan de Desarrollo.

¿Cuáles son los ejes fundamentales del Plan?

El Plan de Desarrollo se estructuró en 7 pilares principales. La estructura propositiva del Plan está conformada por cuatro pilares estratégicos y tres pilares transversales que responden a las dimensiones del desarrollo definidas en la metodología BIT PASE que fueron definidas con la ciudadanía de acuerdo con las prioridades identificadas.

¿Cuáles son esos pilares?

Los pilares estratégicos son: ‘Nos une un ambiente natural y construido’, ‘Nos une la movilidad’, ‘Nos une el emprendimiento, la innovación y el desarrollo económico’ y ‘Nos une una sociedad justa, incluyente y educada’.

Pero, además, hay unos pilares transversales: ‘Nos une el empleo’, ‘Nos une la salud y la vitalidad’ y ‘Gobernanza territorial’. Se definen los pilares como transversales, teniendo en cuenta que hay acciones y esfuerzos que complementan las acciones de los pilares estratégicos. Por ejemplo, una ciudadanía con salud y empleo aporta a una ciudadanía justa e incluyente.

¿Cómo influyó la llegada de la pandemia en el avance del Plan de Desarrollo?

Ha sido un punto de inflexión muy importante en todos los planes de desarrollo a nivel nacional; por supuesto, Tunja no podía estar alejada de esta realidad que afecta directamente el desarrollo de nuestra ciudad. Esto nos llevó a reevaluar muchos aspectos desde el punto de vista de la estructura propositiva del plan como tal y, además, de las condiciones presupuestales de la administración.

¿Pero, tuvieron que hacer ajustes sobre la marcha en el documento?

La necesidad de atender estas problemáticas que la coyuntura de la pandemia generó, hizo que la administración municipal realizará una serie de modificaciones presupuestales para atender, principalmente, el mejoramiento de la red de prestación de servicios de salud, así como la manutención de las familias que, por el aislamiento preventivo, no pueden generar ningún tipo de ingreso.

¿Modificaciones como cuáles?

A partir de esto, el equipo del Plan de Desarrollo junto con la administración municipal ajustó el componente estratégico y financiero, con el fin de atacar no solo los problemas que tiene actualmente la ciudad, sino los efectos posteriores a la pandemia, como lo es la reactivación económica, la atención a morbilidades previas, fomentar actividades de generación de valor agregado en los bienes y servicios, fortaleciendo el sistema de salud y generando toda una nueva propuesta de reactivación y desarrollo económico local, que permita a la ciudad y sus habitantes tener condiciones reales de bienestar.

¿Tiene un capítulo especial dedicado al sector de la salud?

La coyuntura de la pandemia y el proceso de actualización del Plan Territorial de Salud de Tunja, tuvieron un punto de encuentro. Durante el proceso de construcción del Plan de Desarrollo también se generó el Plan Territorial de Salud, que tiene una visión a 10 años y que, a su vez, fue aprobado por el Concejo municipal.

Al juntarse la pandemia con el proceso de actualización de este instrumento del sector de la salud, se complementan y fortalecen las acciones para atender esta emergencia junto con las necesidades de salud de la comunidad, en articulación con directrices y lineamientos del Ministerio de Salud.

¿Y en materia de empleo pospandemia?

El documento apunta a fortalecer la base de la economía de la ciudad, las micro, pequeñas y medianas empresas que constituyen el 95% del tejido empresarial de Tunja, inyección de liquidez y capital semilla, así como la atracción de la inversión generando un entorno de negocios en la ciudad, así como robustecer el sector de la innovación, la ciencia, la tecnología y el emprendimiento.

¿Qué hacer para la activación económica, luego de todo esto?

El Plan de Desarrollo apunta a la generación de valor agregado y a la activación económica a través de alianzas con empresas privadas, desarrollo de proyectos para la generación de ingresos y sustento de las familias, así como la generación de gasto público enfocado a la activación de sectores fuertes en la economía tunjana: la construcción, agroindustria y la prestación de bienes y servicios del sector comercio.

¿Y la rehabilitación del comercio?

Acá es importante mencionar que, además de recuperar el dinamismo en el comercio, se debe buscar cómo adaptarse a nuevas tendencias de negocio, generar liquidez mediante acuerdos con instituciones financieras y fondos de emprendimiento, pero, además, el Gobierno nacional debe ajustar tasas de interés para generar flujo de capital y reactivar la economía.

La ciudad de Tunja, como las demás entidades territoriales, requieren de un trabajo articulado con el nivel nacional, teniendo en cuenta que las acciones de financiación y acceso a crédito están estrechamente ligadas con dichas instancias en marco de las nuevas disposiciones y decretos emitidos a causa de la emergencia sanitaria. La administración municipal está comprometida con la gestión de líneas de crédito para que las empresas, especialmente las pequeñas y las medianas, logren mitigar a corto y mediano plazo las adversidades derivadas de la pandemia.

¿Qué inversión contempla el Plan de Desarrollo?

El Plan Plurianual de Inversiones para los años 2020-2023 se estima en un valor superior a los 1.206 millones de pesos. Este plan de inversiones fue generado teniendo en cuenta el marco fiscal de mediano plazo, así como los ingresos desarrollados en los últimos años.

A partir de esto, y teniendo en cuenta las obligaciones y destinaciones especificas con las que cuenta la administración municipal, se priorizan las inversiones en los sectores de salud, educación, gasto social y generación de empleo de forma transversal.

¿Y los demás sectores?

Pues con los recursos restantes, junto con la gestión que se desarrolle con el nivel nacional, departamental, la cooperación internacional y las diferentes agencias de desarrollo, se priorizarán en el mejoramiento de la red vial, el fomento agropecuario, las acciones de preservación y manejo medioambiental, el fortalecimiento del sector cultural y turístico y el ordenamiento territorial.

¿Es decir, se van a priorizar esos cuatro sectores?

No. También se priorizará el sector transporte, medio ambiente y planeación. Esto teniendo en cuenta que se debe priorizar la inversión en sectores que apalanquen la generación de ingresos y crecimiento del ciclo económico de la ciudad, máxime después de lo que nos dejará esta pandemia.

¿Hacia dónde se está proyectando a Tunja?

Tal como lo definimos en el Plan de Desarrollo, para el año 2030 Tunja se convertirá en una ciudad con mayor empleabilidad y habitabilidad, que genere valor agregado y nuevo conocimiento en sus procesos, bienes y servicios.

¿Y cómo lograr eso?

Por medio de la reactivación productiva, el desarrollo rural y el fortalecimiento de condiciones sociales, económicas y de salud en armonía con el medio ambiente, que garanticen oportunidades de bienestar y calidad de vida para todos sus habitantes. 

¿En materia de movilidad qué van a hacer?

Los tunjanos podrán ver un plan que articula una visión de ciudad a mediano y largo plazo con las necesidades actuales y futuras de propios y visitantes, verán la organización y modernización necesaria del transporte público, tanto para prestadores como para usuarios, y serán partícipes de un sistema de movilidad activa o alternativa que aportará al objetivo de hacer de Tunja un ejemplo de sostenibilidad.

Bueno, ¿y la seguridad vial?

Claro. También se tiene un programa referente en términos de mejorar la seguridad vial en la ciudad y disminuir notoriamente los índices de accidentalidad y, sobre todo, los índices de mortalidad en la capital del departamento a través de estrategias participativas y de alto impacto, así como trabajar desde la base de la sociedad con los planes de movilidad escolar.

 ¿Y cómo integrar todo esto?

El Plan Maestro de Movilidad y Espacio Público integrado con el Plan de Desarrollo y el POT, también demostrarán la sinergia entre estrategias para dejar soluciones de movilidad a todos los habitantes para esta y otras vigencias. Particularmente, se dará inicio desde este año a la estructuración técnica, legal y financiera del Sistema Estratégico de Transporte Público (SETP) para Tunja.

Para ello se desarrollarán las acciones necesarias para gestionar los recursos ante el nivel nacional y así dar inicio a la implementación del SETP, en donde la infraestructura para la movilidad tendrá una transformación y modernización muy importante, en busca de desarrollar un transporte ordenado, moderno, inclusivo y agradable para la ciudadanía.

¿Y la malla vial?

La prioridad en infraestructura para Tunja en los próximos años es la malla vial, construcción de nuevas vías (Avenida del Río, transversales, glorietas…), mantenimiento de la malla vial que se encuentra en mal estado, así como la conectividad entre barrios, ciclo rutas, andenes y senderos peatonales, todo enmarcado dentro del Plan de Movilidad y la estructuración del Sistema Estratégico de Transporte Público (SETP).

¿Y en cuanto a infraestructura?

Desde luego que se tiene contemplada la construcción de equipamientos públicos, como parques, salones comunales, proyecto para el antiguo terminal, continuación de colegios, escenarios deportivos, entre otros, construcción de espacio público, plazoletas, movilidad peatonal y para bicicletas.

¿Y esas construcciones tendrán alguna característica especial?

Sí, toda la infraestructura con el principio transversal de la sostenibilidad, energías renovables, reciclaje de recursos, huella de carbono neutro, cero plásticos, reverdecimiento de la ciudad, teniendo como modelo la construcción de la Ecocuadra en el barrio Libertador, para ser replicada posteriormente en diferentes sectores de la ciudad. Pero, además, la vinculación de la academia para evidenciar físicamente a Tunja como ciudad universitaria, siendo una capital laboratorio de espacio público sostenible. 

¿Y dónde queda el ordenamiento territorial?

Es otro aspecto importante y relevante del plan de desarrollo ‘Tunja, la capital que nos une 2020-2023’. El componente de ordenamiento territorial es imprescindible para la ciudad, construir un plan de ordenamiento territorial (POT) concertado, actualizado y con una visión de territorio moderno y sostenible, que adapte un catastro multipropósito efectivo y que desarrolle una sinergia entre la dinámica de progreso de la ciudad con un orden eficiente del territorio, visualizando un futuro a mediano y largo plazo, de tal forma que permita priorizar las inversiones de forma inteligente y equitativa y que, a su vez, transformen e impacten positivamente en la comunidad.