Con una pala y una pica prestada comenzó hace 37 años Milpa, la productora de coque más importante del país

MILPA es la empresa productora y comercializadora de coque metalúrgico más importante de Colombia y una compañía pionera en minería de carbón subterránea en América Latina. Para consolidarse tuvo que pasar más de un siglo de historia.

Todo comenzó a finales del año 1800, cuando un grupo de ingleses llegó al hoy municipio de Samacá (Boyacá), para montar una de las primeras empresas siderúrgicas del país.

Años después, esa compañía quedó sepultada por una avalancha, producto del desbordamiento de una represa. Sus sobrevivientes conformaron una empresa textil que funcionaba con una termoeléctrica a base de carbón, que más adelante se convertiría en la gran electrificadora de Boyacá.

En ese momento entró en escena la familia de Miguel Parra, fundador de Milpa. Una modesta mina, propiedad de la madre de Parra, que proveía el carbón a esa termoeléctrica.

Miguel Parra siempre ha estado en contacto con este mineral, incluso llegó a convertirse en su escape. «La letra con sangre entra», recuerda para explicar que en esa época el ambiente escolar era complicado, por eso decidió a los 9 años de edad abandonar el colegio y adentrarse del todo en el mundo de la minería de carbón.

Cuando tenía 20 años conformó una pequeña empresa de la mano de su fallecida esposa, Angelita Castiblanco. “Con la primera venta de carbón compramos nuestras propias pica y pala. Y con la segunda, la carretilla. Antes todo era prestado”, relata Parra.

En 1990 Milpa ya se había constituido como una gran compañía familiar productora y comercializadora de coque metalúrgico con proyección, pues como cuenta su fundador,“sin el carbón coquizable que produce Colombia no se podría hacer coque, y sin este no existiría el acero, indispensable para la construcción y diferentes industrias como la automotriz”.

Milpa dio inicio a sus exportaciones a Cuba, donde recibió la medalla de oro por la calidad de su producto. Este galardón le abrió las puertas en Venezuela y México.

La empresa se ha caracterizado por ser pionera en investigación en temas relacionados con minería subterránea de carbón y en las mejoras continuas en la producción de coque y la calidad de sus productos, lo cual le ha permitido posicionar su coque metalúrgico como el mejor de América del Sur, que ha sido vendido en cerca de 25 países. Hoy, sus principales clientes están en Brasil, México y algunos países de Europa.

El compromiso de todos, el secreto del éxito

Miguel Parra C. atribuye el éxito de su compañía a la gestión de sus hijos, familiares, empleados, proveedores, puertos, transportadores, y demás colaboradores que hacen parte de la cadena logística que genera esta industria, quienes «se han puesto la camiseta para producir un producto de excelente calidad. Es gracias a ellos y a las bondades del subsuelo colombiano que nuestro producto ha empezado a posicionarse como uno de los mejores del mundo”, dice.

Los colaboradores ejercen su labor desde los frentes de trabajo de la compañía, dos ubicados en Boyacá y uno en Cundinamarca.

Según Parra, tienen la mejor tecnología de coquización en América Latina, son los pioneros en minería de carbón subterránea y por eso se han esforzado por cumplir con todos los estándares en materia de seguridad minera, así como ambientales y sociales. «Siempre nos ponen como ejemplo de minería bien hecha. Trabajamos con los más altos estándares ambientales y sociales. En nuestras aguas se pueden ver peces y ranas nadando».

Para este empresario, la minería de carbón es y será uno de los motores del país que genera miles de empleos formales y regalías, pero que se está estigmatizado. «Hay que diferenciar los impactos de la minería legal e ilegal», advierte.

Además, rescata el valor de las iniciativas de responsabilidad social de la Fundación Milpa, uno de sus grandes orgullos. Hoy, la compañía está en manos de sus hijos, quienes desde distintas áreas contribuyen al futuro de una empresa de tradición.

Una empresa que ha cavado su historia

A finales de 1889 se dio inició a la explotación minera de carbón metalúrgico gracias a la labor de los antepasados de los actuales socios de C.I. MILPA S.A. ‘primera generación’, así como otras familias, quienes vendían el carbón extraído de las minas ubicada en el municipio de Samacá, a la primera siderúrgica de Colombia.

Se llamó “Ferrería de Samacá”, y fue fundada en la década de 1850 por los técnicos ingleses Martin Perry y Santiago Bruce e impulsada por José Eusebio Otálora, hoy patrimonio arquitectónico de Boyacá; la cual cerró sus instalaciones en 1884 debido a dificultades financieras y posteriormente a raíz de que a principios de 1900 se rompió una represa en la parte alta que arrasó con todo el complejo industrial que existía.

Años después, nace la primera textilera del país, “Textiles Samacá” (1889-1964), de origen inglés, abriendo paso a la industrialización en Colombia; en la cual se producía la famosa “manta Samacá”, que se catalogaba dentro de las mejores telas de la época.

Con motivo de este segundo desarrollo industrial, se instala en Samacá la primera termoeléctrica que funcionaba a base de carbón, convirtiéndose en “Electrificadora de Boyacá”. Esta suministraba la energía para la textilera y el remanente para el alumbrado de la ciudad de Tunja.

Gracias a lo anterior, se continúa con la producción de carbón con la ‘segunda generación’ de lo que es hoy C.I. MILPA S.A. y con esta, la producción de coque colombiano.

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Posteriormente, en la década de los 50, por iniciativa del gobierno colombiano, nace la “Empresa Siderúrgica Nacional de Paz del Río”, posteriormente “Acerías Paz del Río S. A.”, con lo que se inicia la explotación de minas de hierro y se continúa con la explotación de minas de Carbón en Boyacá y en consecuencia la industria de coquización del carbón en Samacá, apareciendo la ‘tercera generación’ de C.I. MILPA S.A.

En el año 1983, después de años de arduo trabajo, se constituye “Inversiones Milpa Ltda”, hoy “Comercializadora Internacional Milpa S.A.” (cuarta generación). En 1991 y sin tener una infraestructura adecuada, MILPA por primera vez logra incursionar en el mercado internacional, a tal punto que le fue otorgada la medalla de oro a la calidad al carbón y al coque colombiano producido por MILPA en una feria internacional, lo que a su vez permitió la incursión en 25 nuevos países, entre los que se cuentan Brasil, Argentina, India, USA, Alemania e Italia, entre otros.