Carboneros, entre el deber de servir y protegerse

Al igual que el resto de las industrias, la minería también está en alerta ante la situación actual del país por el coronavirus.

Foto: Boyacá Sie7e Días

Al respecto, la Federación Carbonera de Boyacá indicó que ya definió medidas para mantener el aprovisionamiento estratégico de este combustible básico en muchos procesos industriales, vitales para superar las necesidades básicas en esta coyuntura, como también la dinámica de las exportaciones e importaciones y al mismo tiempo proteger a los trabajadores.

La entidad agregó que tanto las medianas como grandes empresas mineras cuentan con protocolos para enfrentar contingencias como esta, por lo que se espera que el impacto de la crisis no se traduzca en paralización del trabajo.

Por esta razón, los empresarios carboneros boyacenses programarán exclusivamente la participación del personal requerido en operaciones básicas y de mantenimiento de las Unidades Productivas Mineras (UPM) y reportarán con la debida anticipación a las autoridades locales, el listado de los trabajadores que van a atender las operaciones.

Foto: Boyacá Sie7e Días

Como medida preventiva, los mineros mayores de 60 años o en condición de vulnerabilidad por su estado de salud o nutrición serán separados de sus labores hasta que pase la emergencia sanitaria, mientras que las personas que queden laborando tendrán una dotación segura y recambio permanente de elementos de protección respiratoria y estarán acatando medidas de higiene, calidad y seguridad alimentaria.

Casi todas las minas funcionan normalmente en toda la región, pero la caída de la demanda industrial de metales y los precios como resultado de la pandemia comienzan a causar un impacto.

Foto: Boyacá Sie7e Días

Dio a conocer la Federación que propondrán a todo el sector que, en cada municipio se arme un aporte de un día de salario quincenal de cada trabajador, empresario minero y transportador que labore en las UPM de la localidad.

Además, que se comprometen a centralizar el mercadeo y distribución racional de productos de consumo general en los hogares de los trabajadores para evitar desplazamientos y contactos innecesarios de las familias, para adquisición de insumos o recursos en efectivo.

Además, se comprometen a no dejar desabastecida a las industrias que motivan la exención de movilidad y actividad del sector, como lo son: coquización para exportación, siderurgia, generación de energía, industrias de alimentos, del papel, concentrados y productos básicos de la canasta familiar.