¿Regresará la ‘horrible noche’?

El Consejo de Estado suspendió el 1 de febrero del 2001, es decir 96 días después de haber sido elegido por 179.163 votos, a Miguel Ángel Bermúdez Escobar como gobernador de Boyacá y cuando apenas completaba sus primeros 33 días de mandato.

El alto tribunal lo hizo tras considerar que Bermúdez estaba inhabilitado para ocupar el cargo, pues había sido condenado en 1985 por peculado, cuando se desempeñaba como gerente de la Industria Licorera de Boyacá. Y aunque Bermúdez se defendió a través de un recurso de reposición, fueron cuatro años para olvidar, cuatro años en los que se le hizo mucho daño al departamento, precisamente por la ingobernabilidad y por el pulso político y los apetitos burocráticos que se despertaron tras la decisión.

Durante algunos meses de ese año, por ejemplo, gobernó como encargado Luis Humberto Montejo Bernal, luego llegó también en encargo Óscar Eduardo Riaño Alonso, quien estuvo parte del 2001 y del 2002. Seguidamente regresó Bermúdez Escobar y estuvo parte del 2002 y el 2003, pero no alcanzó a terminar y otra decisión lo volvió a sacar del Palacio de la Torre, dando paso al encargo de Rafael Romero Piñeros, quien terminó el periodo.

Esta solo es una pequeña píldora para la memoria de lo que se le puede venir a Boyacá si hoy, o en los próximos días, se da el pronunciamiento del Consejo de Estado en el que se anula la elección de Ramiro Barragán como Gobernador de Boyacá.