El miedo de los comerciantes por actos de vandalismo los tiene trabajando a media marcha.

Muy preocupados se han visto los presidentes de las cámaras de comercio en Boyacá a raíz del impacto generado por el paro que inició el pasado 21 noviembre y que mantiene en zozobra a los comerciantes.
En la ciudad de Tunja, la Cámara de Comercio, a la cual están afiliadas 40 mil empresas y 1.500 comerciantes especiales, su presidente Julián Galvis manifestó intranquilidad por los efectos que han causado las manifestaciones y protestas iniciadas el pasado jueves.
“Desde la Cámara estamos muy preocupados: el impacto negativo es muy alto, las pérdidas son diarias y estas se van incrementando”, dijo el presidente de la entidad.
“Por tal razón, se está desarrollando un estudio para determinar concretamente cuánto han sido las pérdidas que hasta el momento se han generado por el paro.
Desde la entidad lo que se hace es proteger la institucionalidad, acoger las disposiciones que el Gobierno nacional disponga para poder conjurar esta crisis”, agregó el presidente ejecutivo.
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