Decisión crucial para el país

Atascadas han estado este fin de semana las redes sociales por cuenta de la invitación a participar o no en la marcha del próximo 21 de noviembre.

Nadie puede opinar al respecto porque de un lado o del otro lo ‘someten a la hoguera’ en esta inquisición en la que se ha convertido esta forma de comunicación digital. Y no es para menos.

Como todo en este país, la mejor forma de acabar algo, de estigmatizarlo es metiéndole política. Y eso precísamente, es lo que se viene haciendo, unos de forma inteligente y otros de manera ingenua con la citación a una marcha que para muchos es más que justa ante los abusos del Gobierno nacional.

Lo cierto es que la mesa está servida: en un país totalmente dividido y polarizado, con un Gobierno que sale de un escándalo para caer en otro, una imagen de desfavorabilidad del presidente Duque en el 69% y cuando Álvaro Uribe Vélez y su Centro Democrático atraviesan por su peor momento.

Sumado a todo esto lo que viene pasando en Ecuador, Chile y Bolívia donde sus presidentes están totalmente acorralados.

En medio de este panorama viene cobrando fuerza una marcha que muchos dicen tiene como objetivo ‘tumbar’ a Duque y licenciar de una vez por todas a Álvaro Uribe.

Una marcha que solo el actual Gobierno puede calmar aceptando errores y asumiendo compromisos serios. Ese será el único antídoto para esta amenaza. La gente se cansó señor Presidente.