Boyacá sin plan frente al cambio climático

A pesar del incremento de las temperaturas, de la alteración en las lluvias y del descongelamiento de los glaciares en la Sierra Nevada de El Cocuy, Güicán y Chita, ni el Minambiente ni las autoridades de Boyacá conocen la magnitud del cambio climático en el departamento.

A la fecha no se tiene un diagnóstico de la manera como el calentamiento global ha impactado a sus ecosistemas y producción agropecuaria, de los que depende la subsistencia alimentaria.

Tampoco se tiene una proyección consolidada a nivel departamental de lo que la crisis del clima podría provocar en inundaciones, deslizamientos, avenidas torrenciales o incendios forestales en los próximos años.

Los únicos datos regionales disponibles sobre el panorama del departamento en esta materia son los que aportó el Ideam a través de la III Comunicación de Cambio Climático.

Allí se anticipa que entre 2011 y 2100 la temperatura de Boyacá podría subir 2,4 grados centígrados. La Ley 1931 de 2018 ordenó que los departamentos formularan sus Planes Integrales de Gestión del Cambio Climático Territorial (Pigcct).

Boyacá, con una variedad de ecosistemas altamente vulnerables, es uno de los departamentos más atrasados. Conocimos que la Gobernación apenas podría dejar contratado el diseño de este Pigcct antes de concluir el año y que ese instrumento solo estaría disponible a finales de 2020.

Eso quiere decir que el gobernador, los alcaldes y los directores de las CAR que sean elegidos en los próximos meses no dispondrán de esa información para el diseño de sus planes de desarrollo y de acción.

Estamos ante un lamentable atraso.

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