San Eduardo se levanta después de la emergencia

Hoy, hace seis meses, la tierra comenzó a abrirse a los pies de San Eduardo, donde aún viven las fuertes consecuencias que trajo un fenómeno natural.

Debido a la emergencia, 62 familias fueron evacuadas de la zona y 30 de ellas lo perdieron todo.

En el mes de septiembre se presentó una emergencia, causada por una falla geológica, que dejó daños por más de $20.000 millones, según datos de la Alcaldía de San Eduardo.

El hecho obligó a que se declarara la calamidad pública y una alerta roja por la amenaza que presentaba para los habitantes de las veredas Alejandría, Cardozo, La Libertad y Villanueva. Inmediatamente se evacuaron 17 familias del sector, pero, con el pasar de los días, el número aumentó a 62, puesto que sus vidas corrían peligro si seguían viviendo en estas veredas.

Así, en este semestre posterior a los hechos, San Eduardo se esfuerza por devolverle la tranquilidad a varios de sus habitantes que lo perdieron todo y a otros que quedaron incomunicados por las afectaciones en vías y en los suministros de servicios públicos.

Por eso, la alcaldesa, María Elisa Montañez, sostiene que las 62 familias evacuadas se encuentran fuera de peligro, ya que están viviendo en el casco urbano del municipio y 31 de ellas reciben ayudas de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres para pagar arriendos. Asimismo, debido a que las familias no pueden volver a habitar en los sectores afectados, ya se están ejecutando los estudios necesarios para revisar unos terrenos en la vereda San Pablo, donde, según Montañez, con ayuda de la Gobernación de Boyacá, se adquirirían unos predios para construir viviendas para las 30 familias que lo perdieron todo.

Durante este tiempo, con una inversión de más de $300 millones, se han abierto otras vías para permitir el tránsito de las personas que quedaron incomunicadas por la falla geológica y que a diario transportaban sus víveres entre el casco urbano y varios sectores del municipio.

Con la ayuda de la Ebsa y la Unidad de Servicios Públicos se reactivó el suministro de energía eléctrica y de agua en las viviendas afectadas. Martínez solicita que el Gobierno Nacional ayude en la construcción de las casas para los damnificados, porque, hasta el momento, “no ha hecho nada y entre los ministerios de Vivienda y Agricultura se ‘pasan la bola’”, concluyó.