Un boyacense es jurado en el Festival Internacional de Cine de Cartagena

Hildebrando Porras, nacido en Duitama, hace parte del grupo de jurados que integran la actual edición del FICCI. Su labor se centra en la votación para los Premios Víctor Nieto del festival, en los que se deben seleccionar los trabajos para las diferentes estatuillas.

Hildebrando Porras es un realizador audiovisual boyacense que es jurado de la actual edición del Ficci.

El realizador boyacense se desempeña como director, guionista y montajista en cine de ficción y documental. La historia de su amor por el cine se remonta a su niñez tardía cuando ,en una edición de Festival Internacional de la Cultura de Boyacá, estando en Tunja, entró a una proyección de Carne de tu carne, película dirigida por Carlos Mayolo. Esta fue la primera vez que vio al director caleño en su faceta actoral, con quien no solo entablaría una gran amistad años después, sino sobre quien haría su más recordada producción documental La Ultima (2007), en la que, sin esperarlo, retrataría las últimas palabras de este referente del cine colombiano.

Ese primer contacto con el cine del Grupo de Cali apasionaría profundamente a Hildebrando, aunque su primera opción de vida no fue el cine, sino la música. En una banda de rock pondría todo su empeño, pero se desencantó por no encontrar un grupo con un interés real por la música. Así, buscó un arte que le permitiera mayor autonomía creativa, pero, paradó jicamente, su opción fue la de un arte colectivo por excelencia, el cine.

Actualmente preside su productora Nadien Films y se encuentra en proceso de producción tres cortometrajes de ficción. Su nombramiento como jurado se dio gracias al reconocimiento de su trabajo y su conocimiento artístico y de la industria. Con relación a los productores boyacenses, Porras afirma que los creadores del departamento han tenido que desarrollar su trabajo por fuera del mismo, pero que no se puede negar que Boyacá hace parte central de la historia y el desarrollo del cine en Colombia, especialmente por la reconocida labor de Gustavo Nieto Roa.

Asimismo, menciona que, aunque el cine boyacense parece ceñirse únicamente a los trabajos de Roa y Rubén Mendoza, hay otros realizadores haciendo cosas muy interesantes, ya sea desde la producción, el sonido, el guion y demás, como el caso de Mónica Duquino, directora del Festival Internacional de Cine de Tunja.

Para Hildebrando, en su época en Boyacá, el cine era demasiado incipiente, pero hoy día hay muchas más cosas como los festivales de cine, algunos apoyos departamentales, pero en especial por parte del Consejo Departamental de Cinematografía de Boyacá, iniciativa de la cual él hace parte.

En este Consejo, con el apoyo de Felipe Aljure, consiguieron del FDC el estímulo Relatos Regionales, a través del cual, anualmente, se apoyan diferentes proyectos de cine únicamente para realizadores boyacenses. De manera que, aunque nuestra industria aún es naciente, ya hay unos primeros caminos para fortalecer al sector en Boyacá.

El cineasta duitamense al final de la conversación dejó una importante cuestión: mencionó que, para él, la historia del cine colombiano está incompleta, por lo que haría falta una contra-historia que revele aportes desconocidos de departamentos como el de Boyacá, que, como producto de algunos relatos muy parcializados, han dejado de lado la participación de otros actores fundamentales en la historia del cine nacional.