Lázaro Cauca

Por: Fabio José Saavedra

Fabio José Saavedra – Especialista en Gestión y Ordenamiento de Cuencas Hídricas

En un país de desigualdades sin liderazgos responsables y objetivos que orienten investigaciones y análisis racionales, para alimentar un diagnóstico acertado de la realidad que vivimos, y así planear y establecer una carta de navegación que nos conduzca por el camino del desarrollo participativo y equitativo.

Mientras esto no cambie seguiremos afrontando situaciones como el proyecto Hidroituango donde los poderes político, económico y social se aliaron para planearlo y ejecutarlo, por sobre todas las circunstancias adversas que se puedan presentar.

No les importó la vida humana y las comunidades establecidas en la región, mucho menos el equilibrio ecológico o los conceptos científicos y tecnológicos formulados por autoridades conocedoras de la especialidad.

¿Por qué la ANLA no lo detuvo a tiempo para haber evitado el desastre ecológico de la cuenca del río Cauca? Es que la cuenca no es solo el cauce y un caudal, es la integralidad de la vida en todo su entorno, desde su nacimiento hasta la desembocadura, son las comunidades y sus actividades, es la flora y la fauna acuática y terrestre, con las dinámicas internas que se generan en cadena; hoy el río fue roto por el muro de la represa, como si partieran un ser vivo en dos partes.

Y la cereza del pastel es el secamiento del cauce, impactando negativamente toda la cuenca, de lo que no podrá recuperarse para volver a condiciones normales. Preocupa algo más, la nube negra de la tragedia que se cierne a futuro, con los movimientos internos de tierra ya manifestados.