En Guateque, se presenció una ‘Batalla campal’ contra la Policía

Una verdadera batalla campal con saldo de cinco agentes de Policía heridos se vivió en Guateque en la madrugada del domingo cuando cerraban el festival de polvoreros.

Durante la ‘batalla campal’ que se vivió en Guateque, cinco uniformados fueron agredidos en la cabeza, cara y extremidades.

Si las fotos de los uniformados agredidos y bañados en sangre son impactantes, los videos que circulan en las redes sociales no tendrían descripción. En ellos se ve claramente cómo decenas de personas borrachas y exasperadas empiezan a lanzar piedras, sillas, palos y cualquier objeto contundente que encontraban para ir arrinconando a los policías que sólo querían reestablecer el orden.

La situación se vivió desde las cinco de la mañana y hasta pasadas las siete, tiempo en el que en las calles del municipio sólo se veía sangre, policías heridos y se escuchaba la gritería de los alicorados que pedían seguir la fiesta en la plaza de mercado municipal, a donde habían llegado luego del cierre del Festival, mientras que los pocos policías ilesos intentaban ayudar a sus compañeros y buscar el diálogo con quienes los atacaban, lo que resultó imposible.

Parece ser que la emoción de los fuegos artificiales y el exceso de alcohol fueron los detonantes para que Guateque despertara en medio del escarnio público y señalado como un municipio donde hace falta autoridad local para garantizar tranquilidad a quienes vayan a vivir sus fiestas.

Lo que se proyectó como el gran cierre de uno de los festivales más importantes de Boyacá, terminó siendo una vergüenza para la organización de celebraciones locales. Según dicen los habitantes, el alcalde, Edwin Bohórquez, dio ‘la bendición’ al evento y decretó la fiesta hasta altas horas de la madrugada, pero cuando la situación se salió de control no se vio para ayudar a mantener la calma y pedir salvaguardar la vida de los uniformados que custodian su territorio.

Según se pudo establecer, días antes la comunidad en general le había pedido al mandatario que los eventos finalizarán máximo a las 3 de la mañana, para evitar el consumo excesivo de bebidas embriagantes y además por el desgaste del refuerzo policial y de los organismos de socorro, peticiones que fueron omitidas por Bohórquez quien no contaba con que los turistas asistentes se salieran de control.

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